Un año más Gernika ha mantenido viva la llama de la memoria. Testigo de los mejor y lo peor del corazon humano ha dicho el obispo Izeta en un acto al que han asistido representantes de todas las instituciones, y por vez primera un alto cargo del PP. Ciudades como Gernika , Nagasaki o Berga han unido su voz wen un homenaje que traspasa fronteras para clamar contra la guerra.