Sociedad -
Coordinadora contra Garoña
La marcha contra Garoña celebra la que podría ser su última protesta
Desde la localidad burgalesa de Barcina del Barco, han llegado a la central, donde han celebrado con champán la decisión de la empresa de no prorrogar la vida de Garoña.
Redacción
La Coordinadora contra Garoña y grupos ecologistas han realizado la habitual marcha desde Barcina del Barco (Burgos) hasta las puertas de la planta nuclear, para pedir su cierre inmediato.
Ha sido la marcha más concurrida de los últimos años y ha recorrido a pie, con un ambiente festivo, los tres kilómetros que separan la localidad burgalesa de Barcina del Barco hasta las puertas de la central nuclear.
Este año ha coincidido con el debate abierto después de que Nuclenor, la empresa que explota la central, no haya presentado en el plazo acordado la solicitud de prórroga para que la central no se cierre el próximo año.
Desde la Coordinadora contra Garoña llaman a la sociedad a movilizarse "para defender un sistema energético limpio, seguro, y sostenible basado en el ahorro y las energías renovables, en contraposición del sistema energético sucio y peligroso que defiende el Gobierno del PP y que está hecho a medida de las grandes empresas eléctricas".
En el comunicado leído al término de la marcha, la Coordinadora contra Garoña, principal convocante de esta 33 marcha contra la central nuclear, ha expresado su convicción de que la nuclear burgalesa debe cerrar en julio de 2013, una vez la empresa propietaria, Nuclenor, ha agotado el plazo sin solicitar la prórroga hasta 2019.
Para la coordinadora, la decisión de Nuclenor de no solicitar la prórroga descubre "dos mentiras" de esta empresa y del "lobby" nuclear, porque "Garoña ni es segura ni la energía nuclear es barata".
Antes del brindis, los portavoces ecologistas han expresado su intención de volver el año que viene a marchar hasta las puertas de Garoña desde la localidad de Barcina del Barco, aunque "para celebrar, por todo lo alto y como se merece, el cierre de la central".
Nuclenor no solicitó la renovación
El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) se ha mostrado contrario, por razones técnicas, a que la empresa Nuclenor, propietaria de Garoña, pueda presentar una solicitud de prórroga para la planta atómica una vez vencido el plazo el 5 de septiembre.
El CSN recibió el 24 de agosto una petición de informe del Ministerio de Industria sobre la petición que había formulado Nuclenor para que se alargara dos meses el plazo para la presentación de la solicitud de prórroga.
El 31 de agosto el CSN emitió un informe en contra de esa opción, y argumentaba que "una ampliación adicional de este plazo, necesario para llevar a cabo la revisión, evaluación, e inspecciones que procedan, afectaría negativamente al rigor y profundidad de la revisión del CSN".
De hecho, el informe sirvió de base para la orden que el Ministerio de Industria emitió el 3 de septiembre en la que se denegó el alargamiento de plazo para la presentación de la solicitud de prórroga.
Herrera apunta a que 'no cabe marcha atrás'
El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, ha admitido su preocupación ante la decisión de la empresa Nuclenor, la propietaria de la central nuclear de Santa María de Garoña, ubicada en Burgos, de no pedir la prórroga para el funcionamiento de este reactor.
"Todo apunta a que no cabe marcha atrás", ha afirmado el presidente de la Junta en una entrevista al Diario de Burgos en la que el jefe del Ejecutivo regional llega a asegurar que este asunto tiene "mala pinta" en cuanto a la reversalidad de la decisión ya que la formalización de la prórroga en plazo forma parte del conjunto de condiciones del CSN.
Herrera va más allá en sus declaraciones y asegura haber hablado con el ministro de Industria, José Manuel Soria, quien no se ha mostrado muy optimista, según el presidente de la Junta, respecto a la posibilidad de reconducir la situación.