Bebés robados -
Testimonio
Un funerario reconoce haber participado en la trama de bebés robados
30 años después, rompe su silencio y se convierte en uno de los pocos testigos que avalan las denuncias de los afectados.
Redacción
El caso de los bebés robados entre los años 50 y 90 está tomando un cariz cada vez más sobrecogedor con las revelaciones que se están dando a conocer en las últimas semanas.
De hecho, cada vez están saliendo a la luz más casos de personas que saben que sus padres no son sus padres biológicos y que se preguntan si su adopción fue legal; personas que sabían lo que pasaba y callaban por miedo, y también personas que participaron directamente ofreciendo niños, secuestrándolos, entregándolos y organizando entierros falsos.
Quienes participaron en aquella "trama", como le ha llamado el lehendakari Patxi López, han guardado silencio, hasta ahora, cuando un implicado se ha atrevido a hablar, convirtiéndose en uno de los pocos testigos que avalan las denuncias presentadas por los afectados.
Se trata de Antonio, un conductor de funeraria en Granada entre los años 1979 y 1988, que en el programa "Ganbara" de Radio Euskadi ha reconocido que llevó féretros vacíos a muchos entierros. Él sabía lo que pasaba y ahora, 30 años después, la conciencia le ha empujado a confesar.
"Me llamaban del Hospital Materno Infantil de Granada para hacer unos servicios de unos supuestos niños fallecidos, y yo, como funerario, llevaba mi pequeño ataúd, bajaba al depósito, y allí me decían 'Coge este paquete, introdúcelo en el ataúd, toma el certificado y que se le dé sepultura', y yo lo hacía. Pero había algunos paquetes que no pesaban ni 200 gramos", ha explicado, visiblemente compungido.
Antonio, que ha asegurado que ha acudido a la Justicia para denunciar estos hechos, ha añadido que le "extrañaba" que en esos servicios funerarios nunca estuvieran presentes los familiares de los niños presuntamente fallecidos: "Nunca me acompañó ningún familiar, ni uno, y eso me extrañaba".
El funerario ha denunciado que se siente "utilizado" por esta "mafia". "Esto es criminal. [...] Habría mucho que hablar sobre este asunto", ha señalado.
Los casos de recién nacidos robados se están destapando por toda España, aunque Euskadi es uno de los territorios donde más casos se están registrando.
Ayer, el lehendakari, Patxi López, afirmó que estos robos no los pudo cometer una "única persona", sino que "tuvieron que estar bien orquestados entre médicos, hospitales y los propios cementerios", por lo que advirtió de que habrá que investigar lo sucedido "hasta el final".
Hasta la fecha se han realizado tres exhumaciones en Bizkaia y Gipuzkoa, sin hallar resto alguno de los bebés que supuestamente un día fueron sepultados allí.