Sociedad -
8 de marzo
Mujeres migrantes en Euskadi: "Lanbide nos segrega a trabajos precarizados"
En sendas concentraciones ante las sedes del Gobierno Vasco y la Oficina de Extranjería de Bilbao, han denunciado que las instituciones las sitúan "en situaciones de vulnerabilidad".
Agencias | Redacción
Euskaraz irakurri: Emakume migratzaileak EAEn: "Lanbidek behin-behineko lanak ematen dizkigu"
Mujeres migrantes y del Movimiento Feminista de Bilbao se han concentrado este viernes ante las sedes del Gobierno Vasco y la Oficina de Extranjería en la capital vizcaína para denunciar "su situación de vulnerabilidad" y su "segregación a trabajos precarizados por la falta de reconocimiento de sus trayectorias profesionales y laborales" por parte de las instituciones.
Las dos protestas ante ambas delegaciones de organismos públicos en Bilbao forman parte de las IV Jornadas de Movilización organizadas por el colectivo feminista, desde este jueves y hasta el domingo, con motivo del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer.
Las concentradas han leído en ambos puntos un manifiesto donde han denunciado que el Gobierno Vasco, a través de Lanbide, "no reconoce sus trayectorias, intereses laborales y profesionales", segregándolas a trabajos "precarizados".
Asimismo, han acusado a las "instituciones vascas" de "no responsabilizarse de mitigar las consecuencias de la aplicación de la Ley de Extranjería" que, entre otras cosas, "las condena a permanecer tres años como mínimo sin papeles", obligándolas "a trabajar 'en B' en los puestos más precarios sin ningún derecho".
En su comunicado, las mujeres migrantes han remarcado que "su situación de desprotección y aislamiento" hace que, cuando viven "abusos racistas y machistas", no puedan "denunciar por miedo a las consecuencias en forma de despido, el CIE o la deportación".
Igualmente han denunciado que no tienen "una asistencia sanitaria en igualdad de derechos porque para tener tarjeta sanitaria les piden un padrón", mientras los bancos les "niegan" la apertura de cuentas con sus pasaportes, lo que les impide "acceder a servicios bancarios y derechos básicos".
Además, el colectivo ha trasladado que las mujeres migrantes tienen que "soportar la mirada estereotipada y desconfiada de las instituciones y la sociedad, que las somete a "un control, infantilización y fiscalización permanentes", desde una mirada que, también "animaliza, exotiza y sexualiza" sus cuerpos.
Tras las dos concentraciones que han llevado a cabo este viernes, por la tarde está prevista una sentada frente al Palacio Foral para proclamar que su feminismo es "antirracista".