Sociedad -
VIOLENCIA MACHISTA
El abogado Alonso Belza, condenado a siete años de cárcel por maltratar a su exnovia
El donostiarra es un "reputado abogado contra la violencia sobre las mujeres". Es por eso que el juez considera que "merece el mayor de los reproches penales".
Agencias | Redacción
Euskaraz irakurri: Zazpi urteko kartzela-zigorra ezarri diote Alonso Belza abokatuari
El abogado donostiarra Miguel Alonso Belza, conocido especialista en violencia contra la mujer, ha sido condenado a penas que suman siete años de prisión por maltratar a su expareja sentimental.
El Juzgado de lo Penal número 2 de San Sebastián ha dictado una sentencia, a la que ha tenido acceso EFE, en la que otorga total credibilidad al relato de la mujer que denunció al letrado, que describió en su denuncia y en el juicio oral numerosos episodios de agresiones físicas infligidos por el letrado a partir de que ella decidiera poner fin a su relación, en el año 2016.
Alonso Belza es conocido por haber representado a la familia de Nagore Laffage, víctima de un asesinato machista en Sanfermines de 2008, además de haber sido abogado del turno de oficio de Violencia Contra la Mujer de Gipuzkoa y haber participado en diversos asuntos judiciales de relevante eco mediático en la CAV.
La sentencia condena a Alonso Belza a ocho meses de prisión por un delito de coacciones leves, 16 meses por un delito de maltrato habitual, cuatro años y seis meses por seis delitos de maltrato no habitual, y otros seis meses de cárcel por un delito de lesiones.
El abogado tendrá que cumplir la pena de prisión, ya que el juez ha desestimado la pretensión de la defensa de que imponga una pena alternativa, como multas o trabajo en beneficio de la comunidad.
La sentencia destaca que Alonso Belza es "un reputado abogado en la lucha contra la violencia sobre las mujeres, que en los últimos años había asumido un papel muy activo, con múltiples intervenciones públicas sobre la materia".
"Esto nos obliga a analizar si estamos ante una especie de doctor Jeckyll y Mr. Hyde, por cuanto el señor Alonso Belza defendía en estrados a mujeres víctimas de la violencia machista con rigor y exquisito celo profesional, pero cuando se quitaba la toga se transformaba en un maltratador, como si adoptase el papel de aquellos hombres contra los que había pedido la máxima de las condenas por sus crímenes machistas, copiando sus métodos y conductas", refiere la sentencia.
Por este motivo, el juzgado entiende que el abogado "merece el mayor de los reproches penales, porque en todo momento fue consciente de la ilicitud de su conducta, en su condición de abogado especializado en la materia".