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Medio ambiente
Más de dos tercios de Euskadi y Navarra han respirado aire contaminado en 2018
El informe sostiene que las abundantes lluvias, el cambio climático y el repunte en la quema de combustibles fósiles son los que mantienen el problema.
Agencias | Redacción
Euskaraz irakurri: Hego Euskal Herriko bi herenak baino gehiagok aire kutsatua arnastu du 2018an
Un estudio sobre la calidad del aire de Ecologistas en Acción concluye que más de dos tercios de Euskadi y Navarra han estado expuestos a unos niveles de contaminación que superan las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, con los consiguientes perjuicios para la salud, los bosques y los cultivos.
El informe sostiene que las abundantes lluvias, el cambio climático y el repunte en la quema de combustibles fósiles son los que mantienen el problema.
El estudio ha analizado los datos de 12 estaciones de medición oficiales instaladas en Navarra y 55 situadas en Euskadi. Según los datos, en 2018 se ha producido una reducción general de los niveles de contaminación.
Sin embargo, se comprueba que la contaminación generada en las capitales (Bilbao, San Sebastián, Vitoria-Gasteiz y Pamplona), autopistas, autovías, centrales térmicas y determinadas instalaciones industriales se extiende por el territorio, afectando a zonas más alejadas y rurales.
El estudio apunta que las elevadas precipitaciones y la inestabilidad atmosférica han reducido los episodios de contaminación, pero también ha favorecido la dispersión y deposición de los contaminantes típicamente invernales.
Por otra parte, los costes sanitarios derivados de la contaminación atmosférica representan al menos 50.000 millones de dólares al año, un 3,5 % del PIB español, según el Banco Mundial, sin considerar el coste de los daños provocados sobre los cultivos y los ecosistemas naturales.
Amenaza para la salud
El ozono troposférico es el contaminante que presenta una mayor extensión y afección a la población, con unos niveles que se mantienen estacionarios o incluso al alza. Esto se debe al incremento de las temperaturas y a las situaciones meteorológicas extremas durante el verano.
El descenso de la contaminación del aire es consecuencia de la coyuntura meteorológica, caracterizada por una mayor inestabilidad atmosférica y la reducción de la producción eléctrica en centrales térmicas. No obstante, el cambio de ciclo económico está conllevando el aumento de la quema de combustibles fósiles en el transporte y la industria.
A juicio de la organización ecologista, la contaminación del aire "debería abordarse como un problema de primer orden". Cada año se registran hasta 30.000 muertes prematuras en el Estado español por afecciones derivadas de la contaminación del aire, según la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA).