Sociedad -
HUELGA FEMINISTA 2019
El Movimiento Feminista de Euskal Herria aboga por un nuevo pacto social
El Movimiento Feminista destaca que el pasado 8M se dio "un paso cualitativo" en la lucha por los derechos de las mujeres, pero advierte de que aún están lejos de conseguir sus objetivos.
AGENCIAS | REDACCIÓN
Euskaraz irakurri: Itun sozial berri baten beharra azpimarratu du Euskal Herriko Mugimendu Feministak
El Movimiento Feminista de Euskal Herria ha considerado que la huelga feminista del 8 de marzo fue "una jornada histórica", con "un masivo seguimiento" de la huelga y las movilizaciones, que ha supuesto "un gran paso adelante" en unas reivindicaciones que, sin embargo, aún están "lejos" de conseguir.
En ese sentido, el Movimiento Feminista ha abogado por un nuevo pacto social: "Hemos visto que existe la suficiente fuerza como para construir una alternativa al sistema".
En una rueda de prensa ofrecida en la Casa de la Mujer de San Sebastián, catorce integrantes de las distintas entidades y asociaciones agrupadas en el Movimiento Feminista de Euskal Herria, han hecho este lunes "una valoración muy positiva" de la jornada de movilizaciones vivida en Euskal Herria el pasado viernes, con motivo del Día Internacional de Mujer.
"Hemos dado un gran paso hacia adelante pero estamos lejos de nuestros objetivos, de socializar los trabajos que las mujeres hacemos gratis, por lo que seguiremos ahondando en los conflictos que la huelga ha sacado a la luz", han dicho Leire Murguialday y Aura Vásquez, dos de las representantes que han actuado de portavoces en la comparecencia.
"Juntas nos hemos empoderado y politizado, y ése ha sido nuestro gran triunfo", han proclamado las feministas, que han anunciado que continuarán su lucha en favor de "un sistema de cuidados público" y de "acabar con el empleo precario de las mujeres".
Además del "éxito cuantitativo" de este 8 de marzo, han destacado "el paso cualitativo" que, a su juicio, se ha registrado el viernes en cuanto a "fortalecer" sus reivindicaciones y sus "bases feministas, anticapitalistas y antirracistas".
A los gobiernos vasco y navarro, y a las "grandes empresas", a quienes consideran "directos responsables de las precarias condiciones de vida y laborales" de las mujeres, les han pedido que no hagan "más gestos simbólicos" sino que "se comprometan" con sus reivindicaciones y pongan en marcha "acciones, políticas y cambios feministas reales". "No toleraremos ningún tope impuesto por intereses del capital o de algunos hombres", han advertido.
Murguialday y Vásquez han reclamado "un nuevo pacto social que ponga las vidas en el centro" y han subrayado que el movimiento feminista vasco "es una fuerza de confrontación y construcción de una alternativa profunda al sistema", para hacer frente al "ascenso de la ultraderecha", "el rearme del capitalismo autoritario", "el colapso ecológico" o "el feminicidio".
Respecto a la huelga laboral, han informado de que "el seguimiento fue masivo", "incontable" y "difícil" de plasmar en cifras, si bien han dado algunos porcentajes de adhesión por parte de las mujeres como el 85 % en la educación pública y del 75 % en la concertada, casi el 100 % en las escuelas infantiles y el 68 % en el Gobierno Vasco, al que han criticado por haber "disminuido" la incidencia por ejemplo en Osakidetza con sus "abusivos servicios mínimos".
Asimismo, ha recordado a todas aquellas mujeres que no pudieron sumarse a la huelga, con un especial recuerdo a las trabajadoras de los sectores más feminizados.
Por otro lado, el Movimiento Feminista ha denunciado que más de 60 mujeres fueron identificadas durante las distintas acciones desarrolladas en pueblos y ciudades de Euskal Herria, además de "la actitud agresiva de la Policía en muchos lugares".