Sociedad -
25 de noviembre
¿Qué historia hay detrás del 25 de noviembre?
El Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer conmemora la lucha de las hermanas Mirabal, opositoras a la dictadura de Trujillo en la República Dominicana.
EITB.EUS
El 25 de noviembre se celebra el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer para denunciar la violencia que se ejerce sobre las mujeres a nivel mundial y reclamar su erradicación.
De acuerdo con los datos recogidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en más de 80 países, el 35 % de las mujeres han sufrido violencia física y/o sexual por parte de su pareja o violencia sexual por terceros en algún momento de su vida.
El día internacional contra la violencia machista conmemora a tres hermanas asesinadas en la República Dominicana el 25 de noviembre de 1960 por el Servicio de Inteligencia Militar (SIM) a orden del dictador Rafael Leónidas Trujillo.
La familia Mirabal
Conocidas como las hermanas Mirabal o “las mariposas”, las hermanas dominicanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal tuvieron un papel activo en contra de la dictadura de Trujillo (1930-1961), convirtiéndose en referentes de la época, primero, y, más tarde, en símbolo mundial de la lucha de las mujeres.
“Las mariposas” se consagraron como heroínas nacionales tras su brutal asesinato el 25 de noviembre de 1960, según la Casa Museo Hermanas Mirabal, que tiene como misión el rescate de la memoria de Patria, Minerva y María Teresa Mirabal Reyes.
Eran cuatro hermanas: Aída Patria Mercedes (1924-1960), Bélgica Adela “Dedé” (1925-2014), María Argentina Minerva (1926-1960) y Antonia María Teresa (1935-1960). La segunda de ellas no tuvo una gran implicación en la política, por lo que no fue perseguida por el régimen trujillista.
Movimiento Revolucionario 14 de Junio
Tras una larga oposición al régimen de Trujillo por parte de las tres hermanas, en enero de 1959 Minerva Mirabal propuso la creación del Movimiento Revolucionario 14 de Junio para hacer frente la dictadura. Pocos días después del primer encuentro formal del movimiento guerrillero, los militares allanaron la casa de Patria Mirabal, donde se hacían las reuniones, y días después detuvieron a los militantes.
El 18 de mayo de 1960, Minerva y María Teresa Mirabal fueron encarceladas en Santo Domingo, acusadas de atentar contra la seguridad del Estado Dominicano. Tras la presión internacional ejercida por la Organización de los Estados Americanos (OEA), el 9 de agosto, Trujillo ordenó la libertad de las dos hermanas; sus maridos, Manolo Tavárez, Leandro Guzmán, y el esposo de Patria Mirabal, Pedro González, sin embargo, continuaron en prisión.
Según el Museo Memorial de la Resistencia Dominicana, Manolo Tavárez y Leandro Guzmán fueron trasladados a la cárcel de Puerto Plata con el fin de que el SIM preparase la coartada del crimen, ya que las hermanas fueron asesinadas cuando volvían de hacer una visita a los encarcelados.
Durante el viaje de vuelta a Salcedo, las hermanas Mirabal y el conductor del vehículo en el que viajaban, Rufino de la Cruz, fueron secuestrados. Tras ser trasladados a La Cumbre, la policía secreta de la República Dominicana apaleó y ahorcó a las víctimas en la casa del capitán Alicinio Peña Rivera.
A continuación, sus cadáveres fueron colocados en el interior del jeep y arrojados por un precipicio en el intento de fingir un accidente de coche.
“Si me mata, yo sacaré mis brazos de la tumba y seré más fuerte”, la frase pronunciada por Minerva Mirabal representa la valentía de las tres hermanas.
Iconos feministas
“Minerva Mirabal fue alma y símbolo de la lucha contra la dictadura de Trujillo como mentora, junto a su esposo Manuel Aurelio Tavárez Justo”, explica el historiador dominicano Roberto Cassá en la segunda edición de su libro Heroínas Nacionales.
Según Cassá, al igual que otras compañeras del 14 de Junio, Minerva Mirabal se hizo con un espacio entre los hombres y, en consecuencia, “rompió los estereotipos sexistas que acuerdan funciones secundarias a la mujer en la vida social”.
El Museo Memorial de la Resistencia Dominicana estima que hubo un total de 50.000 víctimas durante la dictadura de Trujillo, pero el asesinato de tres mujeres tan solo tenía un precedente reconocido: el de Altagracia Almánzar, que fue asesinada junto a su marido José Virgilio Martínez Reyna en 1930.
Tal es el reconocimiento a “las mariposas” en la República Dominicana a día de hoy, que el 20 de noviembre de 2007, aniversario del asesinato de las hermanas Mirabal, se promulgó una ley para cambiar el nombre de la anterior provincia Salcedo, donde se encuentra la localidad de la familia, a Hermanas Mirabal.