El disidente chino Liu Xiaobo, Nobel de la Paz

El escritor y disidente chino Liu Xiaobo, uno de los líderes de las protestas de Tiananmen de 1989, es el ganador del Premio Nobel de la Paz de 2010 por su compromiso con la defensa de los Derechos Humanos en su país.

Al comunicar hoy su fallo desde su sede noruega, el Instituto Nobel ha precisado que Liu, actualmente encarcelado en su país, obtuvo el premio "por su largo trabajo no violento a favor de los Derechos Humanos en China".

El Instituto ha asegurado haber "deliberado largamente antes de tomar esta decisión que conecta los Derechos Humanos y la paz". "Liu se ha convertido en el símbolo más claro de la amplia lucha por los Derechos Humanos en China", ha afirmado el portavoz.

Liu, profesor de la Universidad de Beijing de 54 años, ha colaborado además en la elaboración de diversos manifiestos de artistas y activistas chinos a favor de los Derechos Humanos, algo que en diciembre le valió una condena de 11 años de cárcel y otra de dos años de privación de derechos civiles.

En los últimos días, el Gobierno chino amenazó a la Academia de Oslo y al Gobierno noruego con graves consecuencias si decidían otorgar el galardón a este crítico literario y político, y ahora, Beijing ha tachado la concesión del Nobel de "blasfemia" y ha advertido de que afectará a las relaciones bilaterales entre China y&' || 'nbsp;Noruega.

No sabe que ha sido galardonado

Según han explicado los dos abogados y amigos más cercanos del intelectual, Mo Shaoping y Pu Zhiqiang, Liu no sabe que ha recibido el galardón porque se encuentra incomunicado en la prisión.

"Liu no sabe nada del premio. Ahora mismo ninguna persona puede contactar con Liu Xiaobo. Tendrá que esperar a la visita mensual que recibe de su esposa, Liu Xia, con la que tampoco he podido comunicar de momento", ja señalado el abogado Mo.

El teléfono de la poetisa Liu Xia, que vive bajo vigilancia domiciliaria desde la detención de su marido en 2008, comunica desde que a las 17:00 hora local (11:00 en Euskadi), se supo que Liu Xiaobo ha recibido el premio Nobel, y hasta el momento ni amigos ni abogados han logrado contactar con ella.

Los dos abogados han expresado sus dudas acerca de quién recogerá el premio del Instituto Nobel Noruego, ya que les consta que el Gobierno no permitirá a Liu Xia salir del país para recogerlo.

Protestas de Tiananmen

En 1989, el intelectual abandonó su docencia en la Universidad de Columbia (Nueva York) y regresó a Beijing para unirse a los estudiantes pro-democráticos de la plaza de Tiananmen.

Xiaobo, nacido en Changchun (Jilin) el 28 de diciembre de 1955, fue el ideólogo de la huelga de hambre, pero también quien salvó cientos de vidas al negociar la salida pacífica de la plaza de la mayoría de estudiantes la noche del 4 de junio de ese año, horas antes de que los tanques masacraran a los cientos o miles que se negaron a abandonar Tiananmen, todavía un tabú para el régimen.

Récord de nominados

Este año el galardón contaba con 237 candidatos, un récord que muchos atribuyen a la talla del ganador del año pasado, el presidente estadounidense Barack Obama.

El Nobel de la Paz es el único de los galardones que se concede y otorga fuera de Suecia, en Oslo en concreto, por deseo expreso de Alfred Nobel, debido a que en su época Noruega formaba parte del reino sueco.

El lunes se fallará el último Nobel de este año, el de Economía. Los ganadores en el resto de categorías han sido los siguientes: Robert G. Edwards en el de Medicina; Andre Geim y Konstantin Novoselov en el de Física; Richard Heck, Ei-ichi Negishi y Akira Suzuki en el de Química y Mario Vargas Llosa en el de Literatura.

Noruega dice que el Comité Nobel es independiente

Por su parte, el ministro noruego de Asuntos Exteriores, Jonas Gahr Støre, ha resaltado que el Comité Nobel es independiente y ha pedido a China que acepte las críticas que vienen de fuera.

"Hemos dicho todo el tiempo que hay una clara línea entre un Comité independiente y el Gobierno noruego. Deben entender que así funciona nuestra sociedad", ha declarado a la televisión pública NRK Støre, quien ha añadido que "no tenemos que pedir perdón por el trabajo del Comité".

Støre ha admitido que no es ningún "secreto" que Beijing ha presionado varias veces a las autoridades noruegas, aunque ha añadido que "mi posición es que no hay base para tomar medidas contra Noruega como país, eso perjudicaría aún más el prestigio de China. Tienen que dejar un espacio a las críticas del exterior".