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Un trabajador del área de neonatos de Cruces contrae tuberculosis
La aparición de este caso ha provocado la puesta en marcha del protocolo de actuación establecido por Osakidetza en el Programa de Tuberculosis de Euskadi.
Agencias | Redacción
Euskaraz irakurri: Gurutzetako jaioberrien arloko langile bat, tuberkulosiak jota
Las autoridades sanitarias de Euskadi han detectado un caso de tuberculosis pulmonar en un profesional sanitario del Hospital de Cruces-Barakaldo (Bizkaia) que desarrolla su trabajo en el área de neonatos del centro hospitalario, donde se trata a recién nacidos que precisan de asistencia médica.
La aparición de este caso ha provocado la puesta en marcha del protocolo de actuación establecido por el Servicio Vasco de Salud-Osakidetza en el Programa de Tuberculosis de Euskadi, informa este servicio en un comunicado.
De acuerdo con este programa, se han activado las medidas preventivas establecidas en dicho protocolo por las que, durante los próximos días, los pacientes y profesionales del centro sanitario serán citados para realizarse pruebas sobre su estado de salud.
De esta forma, en primer lugar serán llamados los padres y madres de los niños y niñas recién nacidos, al igual que los pediatras de estos bebés, y se les ofrecerá asimismo un teléfono de contacto para aclarar todas sus posibles dudas.
Además, el Servicio de Prevención convocará al Comité de Seguridad y Salud del Hospital para facilitar toda la información necesaria a los trabajadores del centro y, asimismo, aplicará las medidas pertinentes a los empleados que hayan podido estar expuestos al contagio con su compañero afectado.
170 casos nuevos cada año en Bizkaia
Osakidetza recuerda que la tuberculosis es una enfermedad que no se ha erradicado, que en Bizkaia se registran alrededor de 170 casos nuevos cada año, y que en la actualidad se cura completamente con un tratamiento adecuado.
Se contagia por las vías respiratorias al toser o al hablar, y en general su transmisión requiere una convivencia íntima y prolongada en el tiempo con el enfermo.
El bacilo de la tuberculosis es muy sensible a las condiciones externas, por lo que no es necesario ninguna actuación sobre las instalaciones del centro y el hospital puede seguir su actividad con absoluta normalidad.