Sociedad -
Donostia-San Sebastián
Ordenan reabrir la instrucción de un presunto caso de bebé robado
La madre dio a luz a una niña en 1963 y a los pocos días fue informada de que el bebé había muerto. Más tarde, recibieron datos que apuntaban a que la recién nacida no había fallecido.
Agencias Redacción
Euskaraz irakurri: Donostian lapurtutako haur baten auzia berriz irekitzeko agindu dute
La Audiencia de Gipuzkoa ha ordenado al Juzgado de Instrucción número 3 de San Sebastián reabrir la investigación de un presunto caso de bebé robado y la práctica de nuevas diligencias, entre ellas la toma de declaración a un testigo que podría aportar nuevos datos a la causa.
Así, la Audiencia guipuzcoana estima un recurso interpuesto por el abogado Guillermo Peña contra el archivo de este caso, en representación de una mujer que denunció la presunta sustracción en 1963 de su hermana recién nacida en el Hospital Nuestra Señora de Aránzazu.
Según esta denuncia, la madre dio a luz a una niña el 2 de marzo de aquel año y a los pocos días fue informada de que el bebé había muerto, aunque con posterioridad la familia tuvo conocimiento de "nuevos datos", de los que "se deducía que la recién nacida no había fallecido y que, en consecuencia, habría sido sustraída a sus progenitores".
El 24 de mayo de 2011 el Juzgado de Instrucción abrió unas diligencias de investigación del asunto, aunque meses después, el 29 de agosto de 2012, acordó el sobreseimiento provisional de la causa, "por no aparecer suficientemente justificada la perpetración de una infracción penal".
Un testigo informó en 2016 sobre una presunta "actuación irregular" de una religiosa supuestamente "responsable de la entrega de un niño en adopción a una familia, al margen de la residencia de Fraisoro", y que podría "ser la misma" que atendió a la madre del bebé cuya desaparición se investiga ahora.