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Portugalete
Portugalete no quiere agresores sexuales en su equipo de fútbol
Así lo ha decidido el pleno del Ayuntamiento, que ha reprobado al equipo portugalujo por contratar a un agresor sexual.
AGENCIAS | REDACCIÓN
Euskaraz irakurri: Portugaletek ez du nahi erasotzaile sexualik bere futbol taldean
El Ayuntamiento de Portugalete ha instado este jueves al club de fútbol de esta localidad a revisar su política de fichajes tras haberse hecho pública la contratación para la próxima temporada de Paul Abasolo, un jugador condenado por agresión sexual.
El pleno municipal ha aprobado por unanimidad una declaración institucional de cinco puntos en la que recuerda al club, que la próxima temporada militará en Tercera División, "que posee una proyección pública, que le corresponde una responsabilidad social y una obligación de ejemplaridad, y que se ha comprometido públicamente con la defensa de valores como la igualdad de oportunidades".
El pleno también ha rechazado una moción presentada por el grupo municipal de EH Bildu en nombre del movimiento feminista de este municipio, que incluía el nombre del agresor y pedía al club la rescisión del contrato firmado.
Esta circunstancia ha provocado las protestas reiteradas de los asistentes al pleno, que ha suspendido por el alcalde, el socialista Mikel Torres, por espacio de una media hora.
El futbolista objeto de la controversia fue detenido por la Ertzaintza acusado de cometer tres delitos sexuales contra otras tantas jóvenes en Gernika (Bizkaia) durante los años 2006 y 2007, por lo que en 2010 se le impusieron dos penas de un año de prisión y una tercera de un año y tres meses de cárcel por los que nunca entró en prisión.
El jugador fue indultado en 2011 por el Gobierno español, por lo que pudo evitar su encarcelamiento, aunque con la condición de participar en un programa de reeducación sexual y la promesa de no volver a delinquir en los cuatro años siguientes.
El jugador ha militado en clubes como el Real Oviedo Club, Sestao River o S.D. Zamudio, equipos de los que, según las feministas, ha tenido que ir saliendo a medida que se iban conociendo los hechos, en algunos casos, y la sentencia condenatoria en otros.