Sociedad -
Nueva Ley en Navarra
La violencia económica y psicológica también será de género en Navarra
El Gobierno foral ha presentado el anteproyecto de ley foral, abierto a la participación ciudadana hasta el 17 de enero. Será sometido a debate en marzo.
Redacción
La violencia psicológica y económica también serán consideradas agresiones hacia la mujer en Navarra, según el anteproyecto de ley foral elaborado por el Gobierno, que recoge, junto al maltrato físico o sexual, la privación intencionada de recursos para el bienestar físico y psicológico de la mujer y sus hijos.
El consejero de Políticas Sociales, Íñigo Alli, y la directora gerente del Instituto Navarro para la Familia e Igualdad, Teresa Nagora, han dado a conocer hoy en rueda de prensa este texto, que está abierto a la participación ciudadana hasta el 17 de enero con la intención de ser presentado en el Parlamento el próximo mes de marzo, antes de que se termine la actual legislatura.
De ser aprobado, el texto sustituirá a la vigente ley foral contra la violencia de género de 2002 de forma que, al igual que entonces, Navarra volverá a ser pionera en aplicar una nueva normativa para erradicar esta violencia, que, hasta septiembre, ha motivada la interposición de 836 denuncias, un 11,7 % más que las registradas en el mismo periodo del año anterior.
De los datos, el consejero ha destacado el incremento de menores afectados y un aumento "muy preocupante" de casos entre los jóvenes, al copar el 17 % del total de denuncias las mujeres de entre 18 y 24 años.
El consejero ha precisado que, entre sus novedades, junto al cambio de definición, al dejar de hablar de violencia de género, la nueva ley foral incluirá todas las formas de violencia contra las mujeres reconocidas en el marco jurídico internacional. Entre ellas, la ejercida por su pareja o expareja, la violencia sexual, el feminicidio, la trata de mujeres y niñas, la explotación sexual, el matrimonio a edad temprana, concertado o forzado, y la mutilación genital femenina.
Asimismo, el anteproyecto establece que las mujeres víctimas de violencia de género tienen derecho a recibir una atención integral encaminada a su completa recuperación, asistencia jurídica especializada, atención y protección policial efectiva, y a suspender su relación laboral con reserva del puesto de trabajo, entre otras cuestiones.
Otra de las novedades recogidas en este anteproyecto son la consideración de los menores como víctimas directas de la violencia de género y la formación permanente de los profesionales implicados en este ámbito, como garantía del cumplimiento de esta norma.