Política -
FISCALIDAD
La reforma fiscal afronta su último examen en el Congreso con la amenaza de Podemos de tumbarla
Conforme a su acuerdo con ERC, EH Bildu y BNG, el PSOE debe añadir el impuesto a la banca en las votaciones para no perder a sus socios.
Agencias | EITB MEDIA
Euskaraz irakurri: Erreforma fiskalak azken azterketari egingo dio aurre gaur Kongresuan, Podemosen mehatxupean
La ley del impuesto a las multinacionales que impone la Unión Europea, en la que se ha añadido parte del paquete fiscal que el Gobierno había anunciado, llega este jueves a sus últimas votaciones en el Congreso con varios detalles de su articulado en el aire y con la amenaza de Podemos de votar en contra y tumbar el proyecto.
Tras superar su trámite en la Comisión de Hacienda, que hubo que prolongar más de siete horas para asegurar apoyos, la ley desembocará en el Pleno todavía con la incertidumbre de saber si finalmente saldrá adelante, ante la fragilidad de los apoyos que tiene el Gobierno. De momento, el texto no incluye los impuestos a banca y energéticas que exigen Sumar, Podemos, ERC, EH Bildu y BNG.
Para conseguir que el texto se aprobara en comisión, al PSOE no le quedó otra que prometer a ERC, BNG y EH Bildu intentar aprobar el impuesto a la banca en el pleno de este jueves mediante una enmienda transaccional de PSOE y Junts que se rechazó en la comisión; así como prorrogar vía decreto un año el tributo a las energéticas, a pesar de que previamente había pactado con Junts dejarlo morir el 31 de diciembre. De hecho, el Ministerio de Hacienda publicó un comunicado después de las votaciones en comisión para decir que, al margen de ese decreto prometido, se mantenía el acuerdo con Junts para no gravar a las empresas energéticas que realicen inversiones en materia de descarbonización, que son prácticamente todas las empresas del sector.
A pesar de que pueda parecer contradictorio, el portavoz socialista en el Congreso, Patxi López, dijo que es "muy compatible" que pueda haber un impuesto a las energéticas, excepto para aquellas que utilizan también sus beneficios para invertir en descarbonización.
Por su parte, el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, urgió al Gobierno a anunciar ya el decreto ley pactado sobre el tributo energético y dio de plazo hasta el jueves para no tener "un problema" en el pleno. Mientras tanto, el portavoz de EH Bildu, Oskar Matute, señaló que tiene un acuerdo apalabrado con el Gobierno, por lo que confía en que se cumpla y en consecuencia votará a favor del proyecto en el pleno del jueves.
Si finalmente el Gobierno cuenta con el apoyo de todos sus socios de investidura; falta por saber qué hará Podemos, que avisa de que no decidirá hasta que no vea una propuesta real para prorrogar el impuesto a las energéticas.
El voto en contra de la formación morada provocaría un empate a 175 votos entre el bloque de investidura, por un lado, y PP, Vox, UPN y Podemos, por el otro. Si esto se produce hasta en tres ocasiones, haría decaer la ley, según lo establecido en el artículo 88.1 del reglamento del Congreso.