Política -
''CASO KOLDO''
El equipo de Armengol sostiene que no hubo "estafa" con las mascarillas que se compraron en Baleares
La información publicada este lunes por el diario 'El Mundo' afirma que el Ejecutivo balear abonó 3,7 millones de euros por esas mascarillas a sabiendas de que eran inservibles para fines sanitarios.
AGENCIAS | EITB MEDIA
Euskaraz irakurri: Armengolen ingurukoek diote ez zela "iruzurrik" izan Balear Uharteetan erosi ziren maskarekin
La presidenta del Congreso, Francina Armengol, sostiene que no se produjo ninguna estafa con el material que el Gobierno balear adquirió a la empresa 'Soluciones de gestión y apoyo a empresas', vinculada al "caso Koldo", en abril de 2020 y destaca que, en aquel momento, la mayoría de administraciones también adquirieron material para uso domiciliario, aunque el objetivo era enviarlo a personal de los hospitales y de las Fuerzas de Seguridad.
Así lo aseguran desde el entorno de la expresidenta autonómica en respuesta a la información publicada este lunes por el diario El Mundo, en la que se afirma que el Ejecutivo balear abonó 3,7 millones de euros por esas mascarillas a sabiendas de que eran inservibles para fines sanitarios.
Esta información se basa en unos correos internos en los que el subdirector de Compras y Logística, Antonio Mascaró, dejaba constancia de que las mascarillas que habían llegado a Mallorca no eran para uso hospitalario.
Desde el entorno de Armengol se ha facilitado la factura correspondiente a un pedido, con fecha del 29 de abril, en la que figura el pago a 'Soluciones de gestión' de 3,7 millones por "mascarillas protección facial FFP2 KN95 uso domiciliario".
Por eso, mantienen que no hubo estafa alguna porque lo que se había contratado era para uso "domiciliario". Y agregan que ese mismo tipo de mascarillas se distribuyó a personal de centros sanitarios y otros servicios esenciales también en otras comunidades.
Según detallan, fue a posteriori, cuando se analizó la calidad de las mascarillas y se comprobó que no tenían la calidad suficiente para ser enviadas a los hospitales y los agentes, cuando se almacenaron y lo que provocó la reclamación de parte del dinero abonado que se cursó después a la empresa.