Política -
Espionaje político
El Parlament pide al Gobierno español investigar y asumir las responsabilidades del espionaje con Pegasus
La declaración ha salido adelante con los votos de ERC, Junts, la CUP y los comuns. El PSC-Units no la ha apoyado porque no se han admitido las enmiendas que había presentado.
Agencias | EITB MEDIA
Euskaraz irakurri: Espioitza ikertzeko eta erantzukizunak bere gain hartzeko eskatu dio Kataluniako Parlamentuak Gobernuari
La Junta de Portavoces del Parlament ha acordado una declaración mediante la que condena el presunto espionaje político de dirigentes independentistas catalanes y pide al Gobierno español investigar el caso.
La declaración ha sido apoyada por los grupos parlamentarios de ERC, Junts, la CUP y comuns. El PSC-Units no ha apoyado la declaración al argumentar que no se han admitido enmiendas que habían presentado, según fuentes socialistas. Entre otras cosas, reclamaban eliminar las referencias a la "causa general contra el independentismo", a la persecución y a la disidencia política, así como exigir investigar al Estado, en lugar de al Gobierno central.
En concreto, la declaración pide al Gobierno de Pedro Sánchez "que investigue con la máxima celeridad y transparencia en los órganos pertinentes, que dé las explicaciones necesarias y se asuman las responsabilidades a todos los niveles pertinentes ante esta práctica ilegal de espionaje contra la disidencia política".
Mediante el texto, el Parlament se ha comprometido a "proteger y preservar los derechos de las personas espiadas, entre ellas diputados de la Cámara, a través también de personarse en las causas que se abran a raíz de las denuncias de las víctimas, entre algunas acciones a emprender".
Además, reclama al Estado la adopción urgente de medidas para "erradicar el espionaje político antidemocrático, y garantizar así que ninguna persona pueda ser víctima de espionaje y persecución por defender un proyecto político", y reafirma su compromiso con la defensa de los derechos y libertades.
La declaración asegura que el "caso de ciberespionaje masivo" supone una vulneración flagrante de derechos y manifiesta su solidaridad con las personas afectadas, entre las que recuerda que figuran la presidenta de la Cámara, Laura Borràs; el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, los expresidentes Quim Torra, Carles Puigdemont y Artur Mas, y otros diputados del Parlament.
Ha defendido que el caso —que tacha de escándalo que ataca a la propia democracia— debería preocupar al conjunto de fuerzas democráticas, y enmarca el uso del programa Pegasus en "la causa general contra el independentismo, iniciada en 2017 para contrarrestar un movimiento pacífico, cívico y democrático".