Política -
Sesión del control al Gobierno
El lehendakari hará propuestas 'en breve' para avanzar en la paz
Patxi López ha anunciado que "habrá posicionamientos públicos", pero ha pedido "prudencia" y "discreción".
Redacción
El lehendakari, Patxi López, ha reafirmado su liderazgo y el del ejecutivo autonómico en el cese de la violencia de ETA y ha anunciado que "en breve" planteará "propuestas para avanzar" en la construcción de la paz y la convivencia.
López ha hecho este anuncio durante el pleno de control del Parlamento Vasco, donde la parlamentaria de Aralar Aintzane Ezenarro le ha interpelado sobre qué iniciativas va a tomar para trabajar en la construcción de la paz y la convivencia.
La parlamentaria abertzale ha criticado la falta de liderazgo del lehendakari desde que ETA anunciara el fin definitivo de la violencia el 20 de octubre, y ha opinado que su papel no debería ser el de ir a Madrid a pedirle al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, una política penitenciaria más flexible, porque hay muchas cosas pendientes que corresponden hacer a la sociedad vasca y "hay que hacerlo cuanto antes".
El lehendakari ha considerado que el cese de ETA demuestra en sí mismo que la legislatura "no ha sido baldía sino todo lo contrario" y ha asegurado que han sido las políticas de firmeza democrática, también las de su gobierno, las que han logrado vencer al "totalitarismo" de ETA.
En ese sentido, ha reafirmado la validez de su propuesta de convivencia para Euskadi, que expuso en el pleno de política general de septiembre, antes del comunicado de ETA.
Para lograr la convivencia, ha hecho hincapié en la necesidad de construir un relato sobre lo sucedido "que impregne de valores democráticos a la sociedad vasca, en el que el asesino sea asesino y la víctima, víctima". En ese relato, los grupos que han apoyado en el pasado la violencia tienen que asumir "su responsabilidad y error para que la sociedad vasca tenga fundamentos éticos y morales en el futuro", ha subrayado.
También ha vuelto a pedir una política penitenciaria "flexible" que se aplique "con la generosidad que ella permite" y ha recordado que la legalidad contempla el acercamiento, la reinserción de los que desean dar el paso y la aplicación de terceros grados a enfermos graves.
Ezenarro ha echado en falta más iniciativa por parte del lehendakari y le ha pedido que promueva un acuerdo político que posibilite estos cambios y que permita a la sociedad ser también la base sobre la que se trabaje la cultura de la paz.
Frente a las críticas de Aralar, López ha pedido trabajar con "discreción" y respetar los tiempos, y ha asegurado que "en breve habrá posicionamientos para avanzar todavía más y serán públicos, pero en política hay que ser extraordinariamente prudentes cuando hablamos de estas cosas con los tiempos, escenarios y con los focos", ha advertido.
En este sentido, ha declarado que "este Gobierno Vasco, que tiene en su haber el liderazgo de la desaparición de ETA, hará esto con prudencia como corresponde" para dar los pasos de manera que "no tengan vuelta atrás".
Nuevo marco estatutario
Por otra parte, López ha afirmado que su gobierno apuesta por avanzar en autogobierno, convivencia y pacto, para lo que tiene sus "propias propuestas" y se ha mostrado convencido de que "en la próxima legislatura, en el Parlamento Vasco se hablará de esto con todos" porque "si el año 2011 ha sido el año del fin del terrorismo, el 2012 debe ser el año del esfuerzo por el empleo en Euskadi".
En respuesta a una interpelación formulada por el parlamentario de Aralar, Mikel Basabe sobre la propuesta del presidente del PSE-EE, Jesús Eguiguren, de crear "una Constitución vasca", el lehendakari ha defendido el Estatuto de Gernika y aunque ha reconocido que "a nadie nos gusta del todo", ha añadido que prefiere "acuerdos imperfectos antes que sueños idílicos que a la larga solo generan confrontación y frustración a la ciudadanía y división en la sociedad".
Asimismo, ha subrayado que no tiene "miedo" a ningún debate pero ha defendido que "toda posición nueva que se plantee deberá concitar como mínimo, el mínimo consenso que tuvo el Estatuto del 1979" porque "lo contrario sería retroceder a tiempos de división y fractura social que no benefician a nadie".