La Cámara Vasca, en contra de sancionar a los que no usen el euskera

El Parlamento Vasco se ha pronunciado hoy en contra de que el Gobierno autonómico imponga multas y sanciones a las empresas y establecimientos comerciales que no presten sus servicios en las dos lenguas oficiales, el euskera y el castellano.

El debate, impulsado por UPyD, tenía como objetivo modificar un decreto de 2008 aprobado por el Gobierno de Ibarretxe, y ha dejado la imagen de una Cámara dividida en torno a cuáles deben ser las políticas de normalización del euskera.

Por un lado, PSE-EE, PP y UPyD, se han opuesto a que el camino de la normalización del euskera sea la "imposición".

Y por otro, PNV, Aralar, EA y EB, han defendido los derechos de los vasco-parlantes y han denunciado que el Gobierno Vasco no ha adoptado en dos años ninguna medida para desarrollar los derechos lingüísticos de los consumidores.

Además, ayer, el PSE-EE registró una iniciativa en el Parlamento Vasco para suprimir definitivamente las sanciones a las empresas que no rotulen y atiendan en euskera. Estas multas llegaban en algunos casos a los 600.000 euros.

La propuesta plantea la modificación de la ley que regula estas sanciones, las cuales no han llegado a aplicarse debido a que el Parlamento aprobó el pasado año una moratoria sobre su ejecución, la cual expira el 27 de julio.

El PSE plantea cambiar la Ley de 2003 sobre el Estatuto de las Personas Consumidoras y Usuarias, en la que se contemplan las multas para las empresas que no cumplan obligaciones lingüísticas como atender y rotular en las dos lenguas oficiales de Euskadi. La normativa, aprobada durante el mandado de Juan José Ibarretxe, fija sanciones de entre 3.000 y 600.000 euros.

Impulso de medidas "que no generen el rechazo del euskera"

Las compañías a las que se refiere la normativa son las grandes cadenas comerciales y empresas de comunicación, transporte y servicios que operen en Euskadi. Los requisitos se fijan en función del tamaño y la ubicación de las compañías, entre otros factores. Según algunas estimaciones, habría 8.000 negocios afectados, que darían trabajo a 200.000 personas.

Pastor ha explicado que el objetivo de la reforma es fomentar medidas de impulso del euskera "que no generen rechazo" y que se "acomoden" a la voluntad de los ciudadanos. En esta línea, ha destacado que las políticas a favor del euskera no pueden basarse en la "imposición" y han de buscar "la libre adhesión".

"Se ha hecho demasiada demagogia"

Por su parte, el secretario general de Kontseilua, Paul Bilbao, ha denunciado hoy que la iniciativa aprobada por el Parlamento Vasco en contra de sancionar a los comercios que no atiendan a sus clientes en euskera supone "arrinconar" a los consumidores vasco-hablantes.

Consejo de los Organismos Sociales del Euskera

Ha descartado que en el caso de que se impongan multas a las empresas por no prestar sus servicios en las dos lenguas oficiales se vean en peligro puestos de trabajo y ha recordado que eso no ocurre ni en la Administración pública donde es obligada la atención a los ciudadanos en euskera y castellano.