Política -
Audiencia Nacional
Portu y Sarasola fingieron ser policías para robar una caravana
Los dos miembros de ETA se han negado a declarar, y sí lo ha hecho la pareja que fue retenida durante 3 días en agosto de 2007 para roba su caravana que luego cargarían de explosivos.
Redacción
Los miembros de ETA Igor Portu y Mattin Sarasola fingieron ser policías franceses cuando en agosto de 2007 abordaron a una pareja y su hijo de cuatro años en la localidad francesa de Messanges, a los que retuvieron durante tres días y robaron una caravana que otros miembros de la organización cargaron de explosivos y abandonaron en un paraje de Coves de Vinrom (Castellón).
Así lo han manifestado los dos testigos durante el juicio que ha comenzado a celebrarse en la Audiencia Nacional contra los dos miembros del ''comando Elurra'', que se enfrentan a sendas penas de 67 años de cárcel por estos hechos que, según la Fiscalía, tenían como objetivo "cometer una acción terrorista en una zona del Levante español".
Portu y Sarasola, que fueron condenados en mayo del año pasado a 1.040 años de cárcel por el atentado contra la T-4 del aeropuerto de Barajas, en el que murieron dos ciudadanos ecuatorianos, se han negado a declarar durante la vista oral argumentando que no aceptan "la autoridad del tribunal".
Declaración de la familia
Las dos víctimas han relatado ante el tribunal que el viernes 24 de agosto de 2007, a las siete de la mañana, unos desconocidos tocaron la puerta de su caravana y, tras mostrar una placa de policía y hablarles en francés, les trasladaron a un aparcamiento solitario. Allí, les informaron de que pertenecían a ETA y les pidieron que permanecieran "callados" para que no les pasara nada.
Tras atarles las manos y ponerles un antifaz, los miembros de ETA condujeron el vehículo durante un par de horas y encerraron a la pareja y su hijo en la habitación de una vivienda de la localidad de Gurs, donde los dos adultos fueron atados al somier de una cama. Aunque les habían anunciado que les liberarían el domingo 26 de agosto, los miembros de ETA no les trasladaron a un pinar cercano hasta la mañana del lunes 27. "Estaban esperando que les dijeran algo, no sé si ver noticias o algo", ha señalado la mujer.
Daños en la caravana
La caravana, que contenía entre 500 y 1.000 kilos de amonal y pentrita, fue explosionada de forma controlada por la Policía en la mañana del domingo. Durante el juicio, que se reanudará el martes, ha declarado por videoconferencia un agente de la Guardia Civil que ha explicado que la explosión provocó un "cráter enorme", destrozó una torre de alta tensión y afectó a varias masías que estaban situadas a 200 metros de distancia.
La abogada defensora de los dos miembros de ETA, que están acusados por tres delitos de detención ilegal, estragos terroristas, tenencia de explosivos y robo, ha alegado que sus representados están procesados en una causa que se sigue en Francia por los mismos hechos.
En su escrito provisional de conclusiones, la fiscal Rosa Ana Lledó precisa que la experiencia provocó a la pareja estrés post-traumático y alteraciones del sueño. Pide por los daños morales sufridos una indemnización de 40.000 euros para cada uno de ellos y 20.000 más en el caso del hijo.