Política -
Audiencia Nacional
Declaran los responsables civiles de las 'herriko tabernas'
Las declaraciones de los imputados finalizaron ayer con el testimonio de Joseba Permach, que negó tener relación alguna con ETA.
Redacción
Los responsables civiles o administradores de las 'herrikos tabernas' declararán este miércoles como testigos en el juicio por la supuesta financiación de ETA a través de estos locales que se celebra estos días en la Audiencia Nacional. Se trata de 110 personas que declaran desde las 09:30 horas.
Ayer fue el turno de los últimos imputados en la causa, entre ellos el dirigente de la izquierda abertzale, Joseba Permach. Permach, así como los otros dos acusados que declararon ayer, negaron tener relación alguna con la organización armada en cualquiera de las responsabilidades que ha asumido en las diferentes direcciones de la izquierda abertzale.
Joseba Permach se enfrenta a una petición del fiscal de 12 años de cárcel y declaró en la vista que se celebra en la sede de la Audiencia Nacional en San Fernando de Henares (Madrid) solo a preguntas de su abogado, Iñigo Iruin, ya que se negó a hacerlo a las del fiscal y a las de los abogados de las acusaciones ejercidas por la Asociación Víctimas del Terrorismo y Dignidad y Justicia.
Permach es uno de los 36 acusados en este juicio seguido por la financiación de ETA a través de las "herriko tabernas" y negó haber sido miembro de ETA, haber colaborado o haber tenido relación con dicha organización y dijo que por tanto no ha recibido ni dado instrucciones a la organización armada.
Joseba Permach, que respondió únicamente a preguntas de la defensa, recordó que estuvo tres años como concejal en San Sebastián hasta que en 1998 fue elegido responsable de Herri Batasuna (HB) en la capital guipuzcoana y que se incorporó a la nueva mesa nacional del partido tras el encarcelamiento de los anteriores integrantes de la misma en diciembre de 1997. Señaló que desde 1998 era el coordinador de la Mesa Nacional, cargo que siguió ostentando cuando se constituyó Batasuna en 2001.
Continuó con su labor política en Batasuna
Según ha relatado, el juez Baltasar Garzón suspendió en 2002 las actividades de Batasuna en un proceso en el que declaró como imputado sin que el instructor decretara prisión contra él sino fianza de 12.000 euros y obligación de presentarse periódicamente en un Juzgado.
Aclaró que no obstante siguió realizando una labor política de forma pública ya que el juez no les prohibió el ejercicio de sus derechos civiles y políticos, y que incluso entró como diputado en el Parlamento Vasco en sustitución de una parlamentaria, actividad que desempeñó hasta 2005.
Permach recalcó que ni como concejal ni como parlamentario participó en actividad alguna ordenada por ETA y que seguían lo marcado en su programa electoral.
Reuniones públicas con varios partidos y dirigentes políticos
Ya después de la declaración de alto el fuego de ETA, el dirigente de la izquierda abertzale subrayó que ha participado en multitud de reuniones públicas con miembros del PSOE, PNV, Eusko Alkartasuna, sindicatos y otras organizaciones y que en todas ellas, los representantes de los otros partidos tenían claro que reunirse con Batasuna no era reunirse con ETA.
Incluso, Permach aseguró el haber recibido en 1998 mensajes del exministro del Interior Jaime Mayor Oreja y hizo alusión a su participación en una reunión en torno a esas fechas con el actual líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, en Navarra.
También se refirió a una reunión de una delegación del Gobierno de José María Aznar con la izquierda abertzale en 1999 en Burgos y a otra del Ejecutivo con ETA en Zúrich (Suiza), "lo que evidencia que los gobiernos diferenciaban de forma explícita lo que era HB-EH-Batasuna de lo que era ETA", dijo ayer martes.
Permach apuntó que tras la suspensión de la actividad de Batasuna las iniciativas de la izquierda abertzale estaban orientadas a la solución del conflicto por vías pacíficas.