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Oriente Próximo
El Parlamento israelí se encamina a prohibir la actividad de la UNRWA en su territorio
La Knéset podría aprobar este lunes dos proyectos de ley destinados a prohibir las actividades de la UNRWA en Israel, a despojar al personal de sus inmunidades y privilegios, y a declararla "organización terrorista". Varios países han mostrado su "profunda preocupación" al respecto.
Agencias | EITB Media
Euskaraz irakurri: Israelgo Parlamentua, herrialdean UNRWAren jarduera debekatzeko bidean
La Knéset (el Parlamento israelí) retomará este lunes su actividad parlamentaria tras concluir un receso de tres meses, y todo apunta a que lo hará aprobando varias leyes que prohibirían a la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), que vinculan a Hamás, operar en territorio israelí, incluido el este de Jerusalén, anexionado unilateralmente en 1980.
El pasado 22 de julio, los legisladores dieron el primer paso aprobando en primera lectura -las leyes israelíes necesitan tres lecturas para ser ratificadas- tres proyectos de ley destinados a prohibir sus actividades en Israel, a despojar al personal de sus inmunidades y privilegios, y a declararla "organización terrorista".
El primer proyecto de ley, presentado por el diputado del Likud -el partido de Benjamín Netanyahu- Boaz Bismuth, busca detener por completo las operaciones de la UNRWA en Israel, lo que significaría el fin de su trabajo en el este de Jerusalén, territorio palestino ocupado tras la guerra de 1967 y anexionado unilateralmente en 1980, una decisión no reconocida por la comunidad internacional.
La UNRWA proporciona actualmente servicios, como educación y salud, en algunos de los campos de refugiados de Jerusalén Este, como el de Shuafat. Sin coordinación con Israel, sería casi imposible para el organismo poder trabajar en Gaza, donde actualmente se encarga de la distribución de ayuda, o en los campamentos de refugiados de Cisjordania, puesto que Israel ya no emitiría permisos de entrada a esos territorios palestinos ocupados, ni permitiría la coordinación con el Ejército.
El segundo proyecto busca revocar las exenciones otorgadas a la agencia de la ONU, entre ellas las fiscales y su estatus de inmunidad. También prohibiría a cualquier agencia gubernamental u entidad pública tener contacto con la UNRWA o con personas que la representen.
El tercer proyecto de ley, que buscaba declarar a la agencia como "organización terrorista", ya no está sobre la mesa por chocar con obstáculos legales, recoge la prensa israelí.
Israel ha justificado estas leyes asegurando que unos 2.100 empleados de la UNRWA pertenecen a la organización islamista Hamás, pero sin presentar pruebas contundentes.
Este domingo, los ministros de Exteriores de Australia, Francia, Alemania, Canadá, Corea del Sur y Reino Unido han expresado en una declaración su "profunda preocupación" por que estas leyes salgan adelante y han pedido a Israel que cumpla "con sus obligaciones internacionales", permitiendo a la UNRWA seguir con sus operaciones.
Incluso Estados Unidos, el mayor apoyo militar y diplomático de Israel, está en contra de los dos proyectos de ley que previsiblemente se votarán mañana. A principios de mes, el Gobierno liderado por Joe Biden envió una carta a las autoridades israelíes en la que mostraba su rechazo a la aprobación de estas leyes ya que, sostienen, supondrán un golpe a la ayuda humanitaria en Gaza y privarán a decenas de miles de palestinos en Jerusalén de servicios sociales básicos, como la educación.
"La columna vertebral de la ayuda en Gaza"
La UNRWA es "la columna vertebral de las operaciones humanitarias en Gaza", ha manifestado Jonathan Fowdler, uno de los portavoces del organismo, quien ha destacado que sin el trabajo de la agencia, 660 000 niños gazatíes perderían a la única entidad capaz de continuar con su educación.
Más allá del devastado enclave, donde la ofensiva israelí del último año ha dejado ya más de 42.000 muertos, la mayoría mujeres y niños, los servicios educativos y sanitarios de los que dependen miles de palestinos en Cisjordania ocupada se desmantelarían, poniendo en peligro la posibilidad de lograr una solución diplomática al conflicto palestino-israelí.
Desde el 7 de octubre de 2023, más de 220 trabajadores de la UNRWA han sido asesinados por Israel y 190 instalaciones han resultado dañadas.
La UNRWA fue establecida en 1950 por la ONU y presta servicios sociales a más de cinco millones de refugiados palestinos -muchos descendientes de los cientos de miles de desplazados por la creación del Estado de Israel- que viven en la Franja de Gaza, Cisjordania ocupada, Líbano, Siria y Jordania.