Cerrada la sede de UNRWA en Jerusalén después de que residentes israelíes le prendieran fuego

La sede la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) en Jerusalén este ocupado permanece cerrada este viernes después de que residentes israelíes prendieran fuego ayer dos veces a su perímetro cuando había empleados de ese y otros organismos de Naciones Unidas en su interior.

El comisionado general de esa agencia, Philippe Lazzarini, quien ha calificado el suceso de "escandaloso", ha anunciado que la sede permanecerá cerrada "hasta que se restablezca una seguridad adecuada".

Durante los últimos dos meses, extremistas israelíes han estado organizando protestas frente al complejo de la UNRWA en Jerusalén, que esta semana tornaron más violentas cuando los manifestantes arrojaron piedras al personal de la ONU y los edificios del complejo.

Desde el inicio de la guerra en la Franja de Gaza, la UNRWA ha estado en el punto de mira de Israel que acusó a una decena de empleados de la agencia de participar en los ataques de Hamás del 7 de octubre. Estas acusaciones hicieron que muchos países donantes cortaran su financiación a la UNRWA, aunque la mayoría la han retomado ante la falta de pruebas concluyentes presentadas por Israel.

El número de personas que ha huido durante los últimos cuatro días de la ciudad de Ráfah, en la frontera entre la Franja de Gaza y Egipto, ha aumentado a cerca de 110 000 ante la "intensificación" de los bombardeos por parte del Ejército de Israel contra la ciudad.