Internacional -
Masacre en Gaza
Netanyahu dice que el ataque contra la ONG "no fue intencionado" y lo coloca "en el marco de una guerra"
Por el contrario, Hamás ha señalado que el ataque israelí contra los cooperantes de WCK forma parte de su "política de asesinatos sistemáticos de civiles inocentes". Por su parte, EE.UU. ha pedido a Israel "una investigación rápida, completa e imparcial", pero no ha condenado el ataque.
Agencias | EITB Media
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha lamentado el "trágico" ataque sobre un convoy la ONG World Central Kitchen (WCK) en la Franja de Gaza y ha asegurado que fue un ataque "no intencionado" del Ejército israelí contra "personas inocentes".
Netanyahu, que se ha referido al tema al recibir el alta tras una operación de hernia, ha afirmado que su Gobierno está en contacto con los países de las víctimas y hará "todo lo posible" para que no vuelva a ocurrir, recordando que ya se ha abierto una investigación.
"Sucede en el marco de una guerra", ha añadido en un mensaje grabado en vídeo. "Por desgracia, en el último día hubo un caso trágico en el que nuestras fuerzas alcanzaron de forma no intencionada a gente inocente en la Franja de Gaza", ha dicho.
El primer ministro ha reiterado que "será investigado de forma exhaustiva", y ha defendido que este tipo de cosas "suceden en la guerra". "Haremos todo lo posible para que no vuelva a suceder", ha añadido.
Poco antes, el Ejército israelí ha anunciado que será una entidad militar independiente, el Mecanismo de Investigación y Evaluación de Hechos, el que investigará el ataque, que ha llevado a la ONG a suspender sus operaciones en la región.
El portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF), Daniel Hagari, ha explicado en un mensaje que ha hablado personalmente con el chef José Andrés, fundador del grupo humanitario, para expresarle sus condolencias por las muertes de los trabajadores.
EE.UU. pide a Israel una investigación, pero no condena el ataque
El secretario de Estado de EE.UU. Antony Blinken, ha pedido a Israel "una investigación rápida, completa e imparcial", pero no ha condenado el ataque. Los trabajadores de WCK "son unos héroes" y "deben ser protegidos", ha recalcado en una rueda de prensa en París junto con el ministro francés de Exteriores, Stéphane Séjourné.
El ministro de Asuntos Exteriores de Reino Unido, David Cameron, ha reclamado a Israel una "explicación completa y transparente". Cameron ha calificado la noticia como "profundamente angustiosa" ya que "se trata de personas que trabajaban para proporcionar ayuda vital a quienes la necesitan desesperadamente".
Por su parte, el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha señalado que el ataque de Israel que ha matado a los siete trabajadores de WCK forma parte de su "política de asesinatos sistemáticos de civiles inocentes".
"Condenamos en los términos más enérgicos los ataques del Ejército de ocupación sionista contra los trabajadores de World Central Kitchen, en el sur de Deir al Balá", ha expresado Hamás en un comunicado.
"Este crimen confirma una vez más que la ocupación aún insiste en su política de asesinatos sistemáticos contra civiles indefensos y contra equipos de socorro internacionales y organizaciones humanitarias, como parte de sus esfuerzos para aterrorizar a sus trabajadores", ha denunciado Hamás.
Las Brigadas Muyahidines han expresado también su "enérgica" condena por este último ataque "nazi" de Israel, que refleja no solo el "desdén sionista" hacia "los pueblos del mundo y el sistema internacional", sino también el "respaldo" del que goza por parte de Estados Unidos.
"La continuación de los crímenes sionistas requiere que cada persona libre en el mundo alce su voz y ejerza más presión para detener los crímenes genocidas sionistas en la Franja de Gaza. La vergüenza caerá sobre todos los que callen y sean negligentes", dice los muyahidines palestinos.
Entre los muertos hay personas con ciudadanía polaca, británica y australiana, dos con la doble nacionalidad estadounidense-canadiense, así como un palestino, según ha confirmado WCK, que ha calificado lo ocurrido de "imperdonable". Los países de origen de las víctimas han expresado su rechazo y han exigido a Israel una investigación rápida y transparente sobre lo ocurrido.
Por otro lado, la flotilla con ayuda humanitaria para Gaza ha puesto rumbo de vuelta a su base en Chipre con buena parte de la carga sin entregar, según han informado fuentes del operativo. Antes del ataque se había logrado desembarcar unas 100 de las 400 toneladas que transportaba esta segunda misión del corredor marítimo de ayuda a Gaza, que partió el sábado pasado de Chipre, en el que colaboran WCK y Open Arms.
Previamente, WCK había anunciado que interrumpía inmediatamente sus operaciones en la región y que tomaría pronto decisiones sobre el futuro de su actividad.
Sin embargo, Chipre ha asegurado que la denominada operación 'Amaltea', el corredor marítimo humanitario se mantendrá pese al asesinato de los siete trabajadores de WCK. Así lo ha confirmado el presidente chipriota, Níkos Christodoulídis, durante una rueda de prensa con la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola.
El jefe de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas, Martin Griffiths, ha expresado su "indignación" por la muerte de los trabajadores de la ONG y ha subrayado que estos hechos y quienes los respaldan "son indefendibles".
Emiratos Árabes Unidos (EAU) ha calificado de "crimen atroz" los asesinatos y ha exigido "el castigo de los responsables".