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DISTURBIOS
Francia prohíbe el uso privado de fuegos artificiales hasta el 15 de julio
El decreto busca "prevenir los riesgos de problemas graves al orden público en las festividades del 14 de julio", la Fiesta Nacional francesa.
AGENCIAS | EITB MEDIA
Euskaraz irakurri: Frantziak su artifizialen erabilera pribatua debekatu du uztailaren 15era arte
Francia ha prohibido desde este domingo el uso privado de fuegos artificiales, hasta el final del próximo sábado 15 de julio, a fin de prevenir su posible utilización en nuevos disturbios.
El decreto prohíbe "la venta, porte, transporte y utilización de artículos pirotécnicos de uso lúdico en el conjunto del territorio nacional".
La prohibición se justifica para "prevenir los riesgos de problemas graves al orden público en el curso de las festividades del 14 de julio", la Fiesta Nacional francesa, y se extenderá hasta el final de la jornada del día 15.
La medida no afectará a los profesionales autorizados o a las colectividades públicas, añade el decreto. El objetivo de este permiso es que puedan tener lugar los tradicionales espectáculos pirotécnicos de la noche del 13 de julio.
La medida había sido anunciada por la primera ministra, Élisabeth Borne, en una entrevista con el diario Le Parisien, en la que avanzó que el Gobierno pondrá en marcha "medios masivos" para mantener el orden en la noche del 13 y la festividad del 14, que además cae en viernes.
Borne reconoció que hay "inquietud" en la población y en los responsables locales por la posibilidad de que haya nuevos disturbios con motivo de esa fecha especial.
Los fuegos artificiales se han usado de forma habitual en los últimos años en ataques contra la policía y muy especialmente en los recientes disturbios que afectaron a zonas periféricas de las principales ciudades francesas.
Esos disturbios, que se extendieron por seis noches consecutivas, comenzaron después de que un joven de 17 años y origen argelino muriera el 27 de junio por los disparos de un policía durante un control en la población de Nanterre, en la periferia de París.
En los últimos días la policía ha confiscado varios cargamentos de fuegos artificiales con destino dudoso, el más importante de ellos uno de 2,7 toneladas detectado en las cercanías de Rennes (noroeste).