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Mohamed Mursi, el 'hermano' discreto

Hombre tímido de escasa estatura, entró de carambola en la carrera presidencial, y ha terminado por convertirse en el primer presidente egipcio de la era post Mubarak.

Mohamed Mursi, primer presidente de la era post Mubarak. Efe.
Biografía | Mohamed Mursi, presidente de Egipto
Mohamed Mursi, primer presidente de la era post Mubarak. Efe.

Redacción

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Presidente del Partido Libertad y Justicia (PLJ), afín a la Hermandad, tiene como principal credencial una larga trayectoria en esta organización, ilegal durante más de medio siglo y muy implantada en los barrios populares.

Siempre inicia sus alocuciones con la "fatiha", la fórmula que abre el Corán, y con la que se subraya la importancia y solidez de un testimonio.

Mursi también hace continuas referencias a la "sharía" (ley islámica) y a su proyecto de "nahda", un renacimiento islámico que abarque todos los ámbitos, para Egipto.

Con su perenne corbata y sus maneras sencillas, este hombre tímido de escasa estatura, que no oculta sus raíces rurales, entró de carambola en la carrera presidencial tras la descalificación del primer candidato de los Hermanos Musulmanes, Jairat al Shater, inhabilitado por haber estado preso.

Profesor universitario en EE. UU.Nacido el 20 de agosto de 1951 en el seno de una familia de clase media en el pueblo de Al Adwa, en el delta del Nilo, Mursi desarrolló una carrera brillante dentro de la Hermandad, que transcurrió en paralelo a la de ingeniero.

Entre 1985 y 2010 fue jefe del departamento de Ingeniería de la Universidad de Zagazig, adonde regresó después de haber trabajado durante tres años como profesor universitario en el estado de California (EE. UU).

A finales de los setenta, empezó a sentirse atraído por la ideología de los Hermanos Musulmanes y en 1979 se afilió al grupo, donde inició su labor en el departamento religioso.

Miembro muy activo Considerado un "hermano" muy activo, ha estado muy implicado en su proyecto político, como en 2007, cuando ayudó a la elaboración del programa de la cofradía que defendía que la presidencia de la República solo podía ser ejercida por un hombre musulmán. El destino de Mursi está unido al de la Hermandad en el Egipto post Mubarak, donde tendrá que demostrar su habilidad para lidiar con la poderosa Junta Militar y contribuir a culminar la transición política, llena hasta ahora de sobresaltos.

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