El Partido Conservador de Boris Johnson pierde bastiones históricos en las elecciones locales

El Partido Conservador ha sufrido derrotas en algunos feudos históricos en las elecciones locales celebradas este jueves en el Reino Unido.

Westminster, en Londres, ha caído por primera vez del lado laborista desde su creación en 1964, los laboristas se han impuesto, además, en Southampton. Los 'tories' han perdido el control de otros dos bastiones como Wandsworth, feudo conservador desde tiempos de Margaret Thatcher, y Barnet.

A falta de finalizar el recuento de votos, los comicios consolidan la tendencia al alza de los laboristas, que ganan decenas de concejales, y el progresivo descenso de los conservadores, a los que la BBC ya concedía esta mañana un retroceso de más de un centenar de cargos electos en Inglaterra.

Pese a las victorias simbólicas de los laboristas frente a los 'tories', el Partido Laborista no ha podido celebrar una victoria global que habría permitido a su líder, Keir Starmer, reivindicarse como alternativa a Boris Johnson en Downing Street. El Partido Liberal Demócrata, que también ha mejorado sus datos, ha ensombrecido en parte los triunfos laboristas. 

De todas formas, Starmer considera que es un "gran punto" de inflexión: "Hemos enviado un mensaje al primer ministro: Reino Unido se merece algo mejor", ha proclamado.

El presidente del Partido Conservador, Oliver Dowden, ha reconocido en declaraciones a Sky News que la formación ha tenido "resultados difíciles" en algunas plazas, pero ha señalado que, "sin duda", los laboristas no están todavía "en el camino hacia el poder".

Además de en Inglaterra, también hubo elecciones locales en Escocia, Gales e Irlanda del Norte, aunque en estos casos el recuento avanza más lento. En Irlanda del Norte también han celebrado elecciones parlamentarias donde el partido nacionalista Sinn Féin apunta a lograr la victoria por primera vez.