Internacional -
Unión Europea
La Unión Europea acuerda una posición común sobre la directiva para salarios mínimos dignos
Los Veintisiete han fijado un marco común europeo para mejorar la prosperidad y la cohesión social. Ahora, la negociación será con el Parlamento Europeo.
Agencias | EITB Media
Euskaraz irakurri: Europar Batasunak jarrera komuna adostu du gutxieneko soldata duinetarako direktibari dagokionez
Los países de la Unión Europea han acordado este lunes una posición común para una directiva que promueva salarios mínimos dignos en la Unión, fijando un marco común europeo que mejore la prosperidad y la cohesión social en el bloque.
Después de estudiar la iniciativa presentada por la Comisión Europea hace un año, los Veintisiete han acordado una base para impulsar sueldos mínimos adecuados, favorecer la negociación colectiva y mejorar la protección de los trabajadores.
Se trata del primer paso para aprobar una directiva sobre salarios mínimos. Esa es una medida que se negociará ahora con el Parlamento Europeo, y que busca avanzar en el pilar social de la UE y garantizar una mayor prosperidad en el conjunto de la Unión.
"Es un importante paso, con el que nos comprometemos a que, en Europa, la gente pueda vivir de su trabajo. Debemos tener sueldos justos, y no podemos basar nuestra competencia económica en sueldos bajos", ha señalado el comisario de Empleo, Nicolas Schmit.
Schmit se ha mostrado optimista de cara a la negociación con la Eurocámara, y espera contar con la directiva en un futuro cercano, pese a las discrepancias de algunos países de la UE; de hecho, la posición común ha salido adelante sin el apoyo de Hungría y Dinamarca, que defienden sus propios sistemas, mientras que Alemania y Austria se han abstenido.
Cambio de paradigma
Pese a que la normativa no obligará a fijar un salario mínimo a nivel de la UE y se limita a establecer mecanismos y herramientas para revisar al alza los sueldos, Schmit ha celebrado que supone un cambio de paradigma para Bruselas, ya que "nadie habría esperado esto hace unos años".
"Los salarios han estado bajo presión en algunos países de la UE para ir a la baja, y, ahora, mandamos un mensaje fuerte, para contar con instrumentos que avancen en una mayor convergencia al alza", ha insistido.
El Estado español se encuentra entre los países de la Unión que impulsan esta directiva europea, al entender que la medida significa avanzar en una Europa más social. La vicepresidenta del Gobierno de España y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha celebrado que, con la propuesta, el bloque asume, "al fin, que una Europa de futuro es incompatible con salarios bajos y condiciones de vida precarias".