Más de medio millar de civiles asesinados a manos del Ejército birmano desde el golpe

A punto de cumplirse dos meses desde que la junta militar birmana asestara un Golpe de Estado, sigue aumentando la violencia contra los manifestantes civiles y ya son más de 500 las mujeres, hombres y menores que han sido asesinados por las fuerzas policiales desde la toma del poder de los militares el 1 de febrero.

Además, la represión de la junta militar birmana se traduce también en la detención masiva de manifestantes contrarios a la sublevación militar y, a pesar de que la mayoría de las protestas se están llevando a cabo de manera pacífica, ascienden ya a 2574, según relata la Asociación para la Asistencia de Presos Políticos (AAPP) birmana.

De igual modo, los bombardeos y ataques de las fuerzas policiales están forzando a miles de personas a huir. Según ha informado el periódico birmano The Irrawaddy, más de 10 000 civiles de la etnia karen han tenido que huir de sus hogares en el sur-sureste del país, tras los bombardeos del fin de semana sobre el distrito de Papun. De ellos, unos 3000 han huido hacia Tailandia, que ya ha anunciado que está preparada para recibirlos, y unos 7000 lo han hecho hacia la zona de la jungla.

El pasado 1 de febrero, tras casi una década de democracia, el Ejército birmano, que ya gobernó el país durante cinco décadas, desde 1962 a 2011, dio un golpe de Estado y detuvo a las y los principales líderes del gobierno, entre ellas a la líder de la Liga Nacional para la Democracia, la nobel de la paz Aung San Suu Kyi, que volvió a obtener, como ya hiciera en 2015, el respaldo del 83 % de los votantes en las elecciones del pasado noviembre.

Respuesta internacional

El Golpe de Estado contra el gobierno electo y la violenta represión contra la población birmana ha suscitado la reacción de numerosas potencias mundiales, entre ellas las de EE UU, Reino Unido y Canadá, que han impuesto sanciones contra los militares y negocios vinculados al Ejército.

EE UU ha anunciado el lunes “la suspensión inmediata de todos los vínculos con Myanmar dispuestos por el Acuerdo Marco de Inversión y Comercio (TIFA) del 2013”, suspensión que durará hasta “el regreso de un Gobierno democrático”, ha apuntado en un comunicado.

Japón, Indonesia y Tailandia han instado también al Ejército birmano a que deje urgentemente de utilizar la violencia contra la ciudadanía.

El Consejo de Seguridad de la ONU, que ha exigido reiteradamente la restitución de la democracia y el fin de la violencia militar en Myanmar, se reunirá mañana para abordar la situación en el país asiático.