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Régimen de Bachar al Asad

La ONU confirma la muerte de 3.500 civiles por la represión en Siria

Las fuerzas gubernamentales han asesinado a miles de personas desde mediados de marzo en su intento de sofocar las protestas contra el régimen de al Asad "utilizando tanques y artillería pesada".

El presidente sirio Bachar al Asad saluda a sus seguidores. Foto: EFE
El presidente sirio Bachar al Asad saluda a sus seguidores. Foto: EFE
El presidente sirio Bachar al Asad saluda a sus seguidores. Foto: EFE

Redacción

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La ONU ha confirmado que al menos 3.500 civiles han sido asesinados en Siria desde mediados del pasado marzo por las fuerzas gubernamentales en su intento por sofocar las protestas contra el régimen de Bachar al Asad.

La portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Ravina Shamdasani, ha agregado que "más de 60 personas han sido asesinadas por fuerzas militares y de seguridad desde que Siria firmara el plan de pacificación auspiciado por la Liga de Estados Árabes".

Se trata de una "hoja de ruta" firmada el pasado día 2 por el Gobierno sirio con el compromiso de cesar todas las acciones violentas, replegar a sus soldados y liberar a los detenidos durante las protestas.

Shamdasani ha señalado que aunque el Gobierno anunció la liberación de 553 detenidos con ocasión de esa festividad, decenas de miles permanecen detenidos y miles son detenidos arbitrariamente cada día".

Según la portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos de la ONU, las fuerzas oficiales utilizan "tanques y artillería pesada para atacar áreas residenciales en la ciudad de Homs", que se ha erigido como bastión de la oposición y por esa razón es blanco de intensos ataques.

De acuerdo con las informaciones recogidas por el organismo de la ONU, la situación es "terrible" en el barrio de Der Balaba, en Homs, que según testimonios de los propios residentes "estuvo asediada durante siete días", en los que no tuvieron acceso a alimentos, agua ni medicinas.

La ONU busca hacer su propia investigación sobre el alcance de las violaciones de los derechos humanos en Siria, para lo que ha creado una comisión compuesta por personalidades independientes, que desde hace varios meses realizan infructuosas gestiones ante las autoridades para que se les permita entrar al país.

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