Internacional -
Conflicto en el Cáucaso Sur
Armenia y Azerbaiyán se asoman de nuevo a una guerra por Nagorno Karabaj
El hasta ahora latente conflicto, el más antiguo en el espacio postsoviético, ha vuelto a poner en vilo a la comunidad internacional con violentos choques en el territorio.
Agencias | Redacción
Euskaraz irakurri: Armenia eta Azerbaijan, berriro gerraren atarian Nagorno Karabaj eskualdeagatik
El hasta ahora latente conflicto de Nagorno Karabaj, el más antiguo en el espacio postsoviético, ha vuelto a poner hoy en vilo a la comunidad internacional con violentos choques en el territorio separatista disputado por Armenia y Azerbaiyán que amenazan con una nueva guerra a gran escala en el Cáucaso Sur.
"Estamos al borde de una guerra a gran escala en el Cáucaso Sur, que puede tener consecuencias impredecibles. La guerra puede ir más allá de las fronteras de la región y extenderse", ha dicho el primer ministro armenio, Nikol Pashinián, en un mensaje televisado a la nación.
Armenia y Azerbaiyán se encuentran en estado de guerra desde 1991, si bien tres años después firmaron un alto el fuego, vigente hasta hoy día, aunque con violaciones denunciadas por ambas partes.
En su discurso de algo más de siete minutos, Pashinián ha afirmado "desde esta mañana Nagorno Karabaj es víctima de una agresión del Ejército azerbaiyano. Los bombardeos afectan a la población civil y la capital (de Nagorno Karabaj), Stepanakert".
Bakú afirma haber lanzado una "contraofensiva" tras haber registrado ataques a gran escala por parte del Ejército armenio contra sus posiciones y asentamientos civiles ubicadas en primera línea de la zona de conflicto.
Mientras Pashinián se dirigía a la nación, el presidente azerbaiyano, Ilham Alíev, ha intervenido ante el Consejo de Seguridad del país caucasiano, donde ha prometido no ceder ni un ápice en el duradero conflicto con Armenia.
"Estamos en nuestra tierra, no queremos la de los demás. Pero la nuestra no la entregaremos a nadie", ha dicho Alíev a la cúpula castrense del país.
La escalada en Nagorno Karabaj ha llevado a Armenia a decretar la ley marcial y la movilización general en todo su territorio, una medida excepcional, que no había llegado a producirse durante otros periodos de aumento de la tensión entre ambos países, como la llamada "guerra de los cuatro días" de abril de 2016.
Pocas horas después, el presidente de Azerbaiyán ha firmado también un decreto sobre la declaración de la ley marcial en todo el territorio del país a partir de mañana, 28 de septiembre.
Voluntarios armenios formados en Erevan. Foto: EFE
Según Bakú, en los enfrentamientos en la zona del conflicto han fallecido cinco ciudadanos azerbaiyanos. El número de los heridos por los ataques armenios, según la Fiscalía del país, asciende a 19 personas entre la población civil.
Armenia a su vez ha informado de 16 militares fallecidos y más de un centenar de heridos a causa de los bombardeos de las fuerzas azerbaiyanas.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y el Ministerio de Exteriores de ese país han prometido este domingo "pleno apoyo" a Bakú en su enfrentamiento con Ereván por el control de Nagorno Karabaj, declaración que fue condenada enérgicamente por Armenia.
Rusia, uno de los mediadores para el arreglo del duradero conflicto en el marco del Grupo de Minsk de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europea (OSCE), ha instado este domingo al cese inmediato de las hostilidades en Nagorno Karabaj.
La Unión Europea (UE) también ha instado a las partes del conflicto a volver a unas "negociaciones sin precondiciones" y abandonar toda la hostilidad militar.
El conflicto armenio-azerbaiyano se remonta a los tiempos de la Unión Soviética, cuando a finales de la década de los 80 el territorio azerbaiyano de Nagorno Karabaj, poblado mayoritariamente por armenios, pidió su incorporación a la vecina Armenia, tras lo cual estalló una guerra que causó unos 25.000 muertos.
Al término de los combates, las fuerzas armenias se hicieron con el control del Karabaj y también ocuparon vastos territorios azerbaiyanos, que llaman "franja de seguridad", para unirlo a Armenia.
Azerbaiyán sostiene que la solución al conflicto con Armenia pasa necesariamente por la liberación de los territorios ocupados, demanda que ha sido respaldada por varias resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
Armenia, por su parte, apoya el derecho a la autodeterminación de Nagorno Karabaj y aboga por la participación de los representantes del territorio separatista en las negociaciones sobre el arreglo del conflicto.