Internacional -
Alarma radiactiva en Japón
Intentos desesperados para enfriar los reactores de Fukushima
- Los helicópteros no han podido verter agua en el reactor 3.
- El comisario europeo de Energía advierte que podría producirse "una nueva catástrofe".
- Casi 200 operarios tratan de contener la fuga.
Redacción
La amenaza nuclear sigue descontrolada en Japón y desde la Comisión Europea se habla ya incluso de "apocalipsis". La crisis ha alcanzado el nivel seis de siete en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares, y no se descarta que tarde o temprano llegue al siete, como el accidente de Chernóbil en 1986.
Esta noche se ha vuelto a producir un incendio en el reactor número cuatro de la central de Fukushima y la radiación sigue emanando sin control. Se cree que las emisiones de radiación pueden proceder de los reactores números 2 y 3 de la planta.
Los helicópteros militares enviados para verter agua sobre el reactor número tres finalmente no han podido cumplir con su misión debido a la intensidad de la radiación, según ha informado la agencia de noticias Kiodo citando a responsables del Ministerio de Defensa japonés. Los helicópteros, pertenecientes al Ejército de Tierra, permanecen ahora a la espera para volver a intentar la operación y facilitar así el enfriamiento del núcleo del reactor.
Se teme que el reactor haya liberado en la atmósfera una nube de vapor radiactivo. La gravedad de esta fuga aún está por determinar y depende de los daños que haya sufrido la vasija del reactor.
El Gobierno ha autorizado elevar a 250 milisievert el límite para los empleados de Fukushima por la situación de emergencia nuclear por la crisis nuclear. La medida, aprobada por los ministerios de Sanidad y Trabajo, permitirá a los operarios volver a las labores como la refrigeración de los reactores averiados, aunque no se sabe si habrá un impacto sobre la salud.
Según el ministro portavoz, Yukio Edano, más allá del perímetro de 20 kilómetros ya evacuado alrededor de la planta el nivel actual de radiación no supone "un riesgo inmediato para la salud". Las autoridades pidieron a los residentes en un radio de 20 a 30 kilómetros que permanezcan en casa con las ventanas cerradas.
Casi 200 operarios tratan de contener la fugaTokyo Electric Power Company (TEPCO), la empresa que gestiona la central nuclear de Fukushima-1, ha informado de que se está bombeando agua a los reactores 5 y 6 de la planta, hasta ahora los menos problemáticos, para enfriar ambos núcleos. Sin embargo, la principal prioridad sigue siendo el reactor 3, el único de la planta en el que se utiliza plutonio, mucho más nocivo que el uranio.
En las últimas horas se ha registrado un aumento de la temperatura en los reactores 5 y 6. Al parecer hay agua suficiente en las piscinas, pero parece haber un problema en el circuito de refrigeración.
Más tarde, la agencia de noticias Kiodo ha informado citando fuentes gubernamentales que es poco probable que el reactor 3 haya sufrido daños de importancia.
En estos momentos hay 180 operarios trabajando en la central después de que este miércoles se evacuara a gran parte de los trabajadores y que solo 50 permanecieran en el lugar por el riesgo. Sin embargo, la cifra dista de los 800 trabajadores que había en el complejo antes del terremoto del 11 de marzo.
Tokio afronta la amenaza radiactiva con más mascarillas y menos tráfico, ya que muchos trabajan desde sus casas y un gran número de extranjeros han optado por marcharse pese a los llamamientos de las autoridades a la calma.
UE
El comisario europeo de Energía, Günther Oettinger, ha advertido hoy que en las próximas horas podría producirse "una nueva catástrofe" en la central nuclear japonesa de Fukushima.
"En las próximas horas corremos el riesgo de asistir a una nueva catástrofe de gran peligro para los habitantes y el bienestar del archipiélago" japonés, ha señalado en su comparecencia en la comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo, tras señalar ayer que la situación en Fukushima estaba "fuera de control".
Primer mensaje del emperador
Por su parte, el emperador Akihito se ha mostrado "profundamente preocupado" por la situación y ha pedido solidaridad a los japoneses, en el primer mensaje televisado a la nación en sus 22 años de reinado.
La alocución del emperador, de 77 años, difundida por la cadena de televisión pública NHK, es una muestra más de la gravedad de la crisis que vive Japón, la peor desde el final de la II Guerra Mundial.
Visiblemente apesadumbrado, Akihito ha pedido al pueblo nipón que no se dé por vencido en este momento de crisis "cuidándose los unos a los otros".
Sigue aumentando el número de víctimas
Las autoridades niponas han elevado hoy a 3.771 la cifra de muertos y a 8.181 la de desaparecidos, si bien el balance final de víctimas puede aumentar todavía en algunos municipios de las provincias más afectadas, como Iwate, Miyagi y Fukushima, donde miles de personas siguen sin ser localizadas.
Unos 100.000 militares japoneses, ayudados por voluntarios extranjeros especialistas en salvamento, peinan la zona devastada donde ya han sido rescatados unos 26.000 supervivientes.
Casi 80.000 edificios y viviendas han sido destruidos y más de medio millón de evacuados vive en unos 2.500 refugios temporales, muchos de los cuales no tienen agua potable o electricidad.
Otra réplica de 6 grados
Por otra parte, un fuerte terremoto de 6 grados de magnitud en la escala abierta de Richter ha sacudido esta madrugada la costa de Chiba (este de Japón) y se ha sentido con claridad en la vecina Tokio, sin que fuese necesario emitir una alerta de tsunami.
El seísmo ha ocurrido a las 12:52 hora local (04:52 en Euskadi) y su epicentro se ha localizado en el Océano Pacífico a 25 kilómetros de profundidad, a unos 70 kilómetros de Mito, en la isla japonesa de Honshu.
Se cuentan ya en más de 200 el número de réplicas del grave terremoto de 9 grados del viernes en la zona nordeste de Japón, que causó más de 11.000 muertos o desaparecidos, según el último cómputo oficial.