Internacional -
El Aaiún
Marruecos dice que 'liberó' el campamento de las manos de las milicias
Rubalcaba ha trasladado a Cherkaoui la "preocupación" del Gobierno. Trinidad Jiménez ha afirmado que "sin confirmación de los datos, un Gobierno responsable no debe especular".
Redacción
El ministro del Interior marroquí, Taieb Cherkaoui, ha denunciado que el campamento de protesta próximo a El Aaiún pasó a estar controlado por "milicias armadas" cuyo comportamiento demuestra que contaban con un "entrenamiento especializado" para cometer actos de sabotaje y de violencia. Su preparación, según el ministro, recuerda a los actos de Al Qaeda y otros grupos terroristas en la región del Sahara y el Sahel.
Cherkaoui ha defendido este martes que Marruecos es un país "soberano" y "democrático" para justificar el desmantelamiento del campamento y el hecho de que no se haya permitido a los periodistas españoles llegar hasta la capital de la antigua colonia.
"Marruecos es un país soberano al igual que otros países y se reserva el derecho a recibir en sus territorios a cualquier individuo", ha señalado en rueda de prensa tras reunirse este mediodía con su homólogo español, Alfredo Pérez Rubalcaba.
Además, Cherkaoui ha asegurado que el saharaui español fallecido, Baby Hamday Buyema, murió atropellado en un "accidente". El mandatario marroquí ha denunciado la "agresión brutal" que, según su versión, sufrieron las fuerzas marroquíes al intentar "rescatar" a ciudadanos "inocentes" que estaban acampados, ya que milicias armadas se habían hecho con el control del asentamiento.
Cherkaoui ha vuelto a cargar contra la prensa española, a la que ha acusado de "tergiversar" lo hechos para denigrar a Marruecos.
Por otra parte, ha insistido en que la intervención de las fuerzas de seguridad fue "pacífica" y "no hubo ni un solo disparo". "No ha habido ningún genocidio ni se perpetraron crímenes contra la humanidad", ha alegado Cherkaoui en su comparecencia.
Gobierno
Por su parte, Rubalcaba ha trasladado a Cherkaui, la "grave preocupación" del Gobierno, los partidos políticos y la sociedad española por la situación en El Aaiún. Así lo ha dicho el vicepresidente español en una rueda de prensa en la sede de su Ministerio convocada después de entrevistarse esta mañana con Cherkaui y en la que ha dicho que el responsable marroquí se ha comprometido "a que si hay algo que el Gobierno español crea que debe ser investigado lo será" y se pondrán a disposición de Madrid los datos obtenidos. Es el caso de la muerte de un saharaui con DNI español, que ya está siendo investigada por la Justicia de Marruecos, según Rubalcaba, que ha añadido que Cherkaui le ha hecho una "exposición minuciosa" de lo sucedido en El Aaiún y ha refutado las "graves acusaciones" vertidas en los últimos días contra las Fuerzas de Seguridad de su país.
La ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, ha afirmado hoy que el Gobierno no hará ningún pronunciamiento sobre lo ocurrido en el campamento saharaui del El Aaiún mientras no tenga más información, porque, a su juicio, condenar la acción de Marruecos sin pruebas "tendría consecuencias".
Jiménez, en respuesta en la sesión de control del Senado a varias preguntas sobre el asalto al campamento, ha afirmado que "sin confirmación de los datos, un Gobierno responsable no debe especular", por lo que ha recomendado esperar a los informes oficiales para saber lo sucedido y cuántas víctimas ha habido.
"Los hechos tienen consecuencias, pero los pronunciamientos sin datos y desde la superficialidad también las tienen", ha advertido Jiménez, quien ha vuelto a pedir a Marruecos una investigación de lo ocurrido y que la prensa pueda informar desde El Aaiún.
La titular de Exteriores ha añadido que a la vista de los acontecimientos, la "prudencia" con la que ha actuado el Ejecutivo "era la mejor consejera desde el primer momento".
La ministra ha reconocido que España tiene una "responsabilidad histórica" con el Sáhara, pero ha precisado que Naciones Unidas no considera a este país como una parte en las negociaciones que auspicia entre Marruecos y el Frente Polisario, que cuentan en cambio con la participación de Argelia y Mauritania.
ONU
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha deplorado la violencia que se produjo la semana pasada en el Sahara Occidental tras el desmantelamiento del campamento de protesta saharaui de Gdeim Izik por las fuerzas de seguridad marroquíes y los posteriores altercados en El Aaiún.
"Los miembros del Consejo deploran la violencia en El Aaiún y en el campamento de Gdeim Izik y expresan sus condolencias por las muertes y los heridos que se produjeron", ha dicho el presidente de turno del máximo órgano, el embajador británico Mark Lyall Grant, a la salida de una reunión del mismo para estudiar la crisis.