Internacional -
Informe sobre VENEZUELA
La CIDH urge a Venezuela a dejar de negar las violaciones de derechos humanos
El análisis de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) denuncia y documenta el "alarmante debilitamiento" de los derechos humanos y la democracia en Venezuela.
Agencias | Redacción
Euskaraz irakurri: Giza eskubideen bortxaketa ukatzeari uko egiteko eskatu diote Venezuelako Gobernuari
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) urge al Gobierno venezolano a dejar de negar las "graves" violaciones de derechos humanos en el país, tras publicar un informe muy crítico con su actuación y la del poder judicial.
"Todavía hay un estado de negación de las violaciones de los derechos humanos. Urgimos al Estado venezolano a reconocerlo y a cumplir con sus deberes internacionales en materia de protección de los derechos humanos", ha dicho a Efe el secretario ejecutivo de la CIDH, Paulo Abrão, tras la presentación del documento.
El análisis de la Comisión denuncia y documenta el "alarmante debilitamiento" de los derechos humanos y la democracia en Venezuela, que se ha "intensificado" en los últimos dos años.
"El informe apunta la necesidad urgente de aceptar ayuda humanitaria para todas las personas que están saliendo del país y para las que están viviendo un desabastecimiento alimentario muy grave", ha indicado Abrão.
La Comisión envió al Gobierno de Venezuela un borrador del informe y recibió como respuesta que el documento "presenta una visión selectiva y altamente parcializada sobre la verdadera situación de derechos humanos" del país, tal como recoge la versión final del documento.
Además, el Ejecutivo de Nicolás Maduro acusa a la Comisión de excluir "casi totalmente" la información oficial enviada en favor de "fuentes carentes de objetividad".
En este análisis, centrado sobre todo en 2017, la CIDH considera que "las graves injerencias de los poderes Ejecutivo y Judicial en el poder Legislativo" son uno de los factores clave de la crisis venezolana.
Además, señala los "altos niveles de corrupción", la "existencia de un patrón de represalias" a quienes se manifiestan contra el Gobierno, "graves restricciones a la libertad de expresión", "el aumento de la violencia y la criminalidad" y el "desabastecimiento generalizado de alimentos, medicamentos, tratamiento, material y productos médicos".