Internacional -
Tercera semana como presidente
La Justicia sigue sin dejar a Trump aplicar su veto migratorio
La Corte de Apelaciones da la razón al juez que bloqueó el veto. Por otra parte, Trump ha dado marcha atrás y aplicará la política de 'una sola China', a pesar de las amenazas que había hecho.
agencias
Euskaraz irakurri: Trumpen migrazio debekua blokeatuta mantendu du AEBko Justiziak
La Corte de Apelaciones del Noveno Circuito de EE. UU. ha decidido rechazar la apelación del Gobierno del presidente Donald Trump sobre el veto migratorio impuesto por el presidente, por lo que este permanecerá bloqueado.
Según el documento judicial, al que ha tenido acceso Efe, el tribunal ha rechazado el recurso de la Administración estadounidense para que volviera a entrar en vigor la prohibición, por lo que es previsible que el caso termine en manos del Tribunal Supremo.
Los tres jueces del tribunal han confirmado de manera unánime la sentencia del juez federal James Robart, quien había decidido el viernes pasado que el veto de Trump debía ser suspendido tras la demanda interpuesta por los estados de Washington y Minesota por el "daño inmediato e irreparable" que podría causar de seguir en vigor.
Asimismo, han rechazado los argumentos presentados por el Gobierno, quienes alegaron durante las audiencias de esta semana que el bloqueo del veto ponía en peligro al país y que la corte no tenía potestad para revisar el caso.
Según los jueces, el Gobierno "falló" en demostrar en su recurso de emergencia que la seguridad nacional estaba en juego por culpa del bloqueo de la prohibición.
La respuesta de Trump no se ha hecho esperar, y ya ha advertido de que seguirá defendiendo en los tribunales su veto a ciudadanos de siete países de mayoría musulmana, considerados con altos niveles de terrorismo.
"NOS VEMOS EN LOS TRIBUNALES, ¡LA SEGURIDAD DE NUESTRO PAÍS ESTÁ EN JUEGO!", ha dicho Trump en un mensaje publicado en mayúsculas en su cuenta personal de Twitter.
Trump da marcha atrás frente a China
Por otra parte, Trump se ha comprometido con su homólogo chino, Xi Jinping, a mantener la política de "una sola China" que adoptó el exmandatario Jimmy Carter en 1979 tras romper sus relaciones diplomáticas con Taiwán, ha informado la Casa Blanca.
Trump y Xi han mantenido una conversación telefónica, "larga" y "extremadamente cordial", en la que han abordado "numerosos temas", entre ellos los comentarios que el presidente estadounidense hizo sobre la política de "una sola China" y sus amenazas de reconocer a Taipei tras ganar los comicios de noviembre.
"El presidente Trump se ha comprometido, a petición del presidente Xi, a respetar nuestra política de 'una sola China'", ha apuntado la Casa Blanca en su comunicado.
"Representantes de Estados Unidos y China entablarán conversaciones y negociaciones sobre diversas cuestiones de interés mutuo", ha añadiado la Casa Blanca sin aportar más detalles.
La controversia acerca de la política de "una sola China" empezó cuando Trump habló con la presidente de Taiwán, Tsai Ing-wen, tras ganar las elecciones en el contacto de más alto nivel entre Taipei y Washington en casi 40 años.
Más tarde aseguró que no permitiría que el gigante asiático le "dicte" lo que debe hacer: "No sé por qué tenemos que estar ligados por una política de 'una sola China' a no ser que lleguemos a un acuerdo con China que tenga que ver con otras cosas, incluido el comercio".
Durante su campaña y también como presidente, Trump ha culpado a China (además de México) del déficit comercial de Estados Unidos y de la pérdida de puestos de trabajo debido a las deslocalizaciones, una tendencia que ha prometido invertir con mano dura frente a Pekín.
Pekín advirtió entonces que sin el principio de "una sola China" se acabaría la estabilidad en las relaciones bilaterales y según publicaban hoy medios estadounidenses Xi se había negado a conversar con Trump hasta que este adoptase el compromiso que finalmente ha tomado, aunque sí se habían enviado dos cartas.