La reunión sobre Siria concluye sin acuerdo en Lausana

La reunión mantenida este sábado sobre el conflicto sirio en Lausana, Suiza, ha concluido sin que se haya logrado un acuerdo para restaurar el alto el fuego, aunque las partes volverán a verse este lunes y han calificado el encuentro como "constructivo".

En la reunión han estado presentes tanto el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, como el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov. "Ha sido un encuentro muy constructivo", ha afirmado Kerry, informan medios rusos y estadounidenses.

"Hemos acordado proseguir las consultas en los próximos días para llegar a un acuerdo que permita avanzar", ha apuntado por su parte Lavrov.

También han participado los ministros de Exteriores de Arabia Saudí, Turquía, Irán, Qatar, Jordania, Egipto e Irak, así como el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura.

"No hemos llegado a ningún consenso referente al cese de las hostilidades, pero tampoco estaba previsto", ha explicado el ministro de Exteriores turco, Ahmet Cavusoglu. El ministro turco ha explicado que no se ha logrado un acuerdo sobre si lo primero era lograr una tregua o si debían en primer lugar separar a la oposición "moderada" de los grupos terroristas.

Primera reunión tras dos semanas

Ha sido la primera vez que los dos ministros (Kerry y Lavrov) se reúnen tras haber roto la cooperación bilateral entre sus dos países hace menos de dos semanas y después de un cruce de acusaciones sobre la responsabilidad por el fin de esa alianza.

Kerry acusó recientemente a Rusia de crímenes de guerra por bombardear de forma deliberada a civiles y hospitales, mientras que el presidente ruso, Vladímir Putin, desechó dichas acusaciones y a su vez denunció que Occidente culpa a su país "de todos los males del mundo".

De hecho, ayer, víspera de la reunión, el propio Lavrov dijo que iba a la cita de Lausana "sin ninguna expectativa".

A pesar de ello, el jefe de la diplomacia rusa aceptó la invitación y se reunió de forma bilateral con su homólogo estadounidense.

La convocatoria, la enésima en más de cinco años y medio de guerra civil, que ha causado más de un cuarto de millón de muertos y 12 millones de desplazados -5 millones de ellos refugiados fuera del país- es la plasmación de que para Washington la única vía viable para detener o, al menos, reducir la violencia es la diplomática.