Fallecen 233 personas en el incendio de una discoteca en Brasil

El número de víctimas mortales en el incendio ocurrido en la madrugada del sábado en una discoteca en la ciudad brasileña de Santa María asciende ya a  233, y más de 100 las personas heridas.

Según el comandante del Batallón de Operaciones Especiales de la Policía Militarizada de Río Grande do Sul, los cadáveres han sido trasladados al Centro Deportivo Municipal, en donde se realizarán las tareas de identificación.

La gente fue pisoteada al intentar huir

Una de las asistentes a la fiesta de la discoteca Kiss en la ciudad brasileña de Santa María ha explicado que tras declararse el incendio que la gente se desesperó e intentó salir del recinto, pero muchos de ellos cayeron al suelo y fueron pisoteados en medio de la estampida.

Uno de los guardias de seguridad de la discoteca, Rodrigo Moura, de 20 años, ha explicado que se encontraba en el escenario en el momento en que el grupo musical que actuaba disparó una luz de bengala que presuntamente provocó el incendio y que cogió un extintor para contener las llamas pero el artefacto no funcionó.

"Hay mucha gente desesperada y llorando. Los hospitales también están llenos de personas que paran a los enfermeros con fotos de los familiares desaparecidos".

Asimismo, una de las supervivientes del incendio ha relatado que el fuego se originó por las chispas de "un artefacto" que llevaba el cantante que actuaba en ese momento y que prendieron en el techo.

Licencia caducada

Por otra parte, se ha conocido que la licencia de actividad de la discoteca estaba caducada desde el pasado mes de agosto, según los Bomberos.

"Está vencido desde agosto. La licencia necesaria para el funcionamiento del local con normalidad", ha revelado el comandante del Cuerpo de Bomberos de la Región Central de Rio Grande do Sul, el teniente coronel Moisés da Silva Fuchs, según recoge el portal de noticias 'G1' de Organización Globo.

Fiesta universitaria

El incendio ha ocurrido en una discoteca de Santa María, en el sureño estado de Río Grande do Sul, fronterizo con Uruguay y Argentina, en la que se realizaba una fiesta de los estudiantes de diferentes cursos de la Universidad Federal de Santa María.

Entre 1.000 y 2.000 personas, la mayoría adolescentes y universitarios se encontraban en el interior de la discoteca 'Kiss' en el momento del incendio, que comenzó a las 02.00 horas de la madrugada, según informan fuentes policiales al diario 'Estado de Sao Paulo'.

"Los bomberos están buscando más víctimas y no podemos concretar el número exacto de fallecidos. La mayoría de los fallecidos murió por asfixia. Cundió el pánico y se acabaron pisoteando entre sí", ha declarado el comandante general del Cuerpo de Bomberos, coronel Guido de Melo.

El incendio, de acuerdo con las primeras investigaciones, podría haber comenzado en el techo de la discoteca a consecuencia de un petardo arrojado por la banda de música que tocaba en ese momento, y que prendió la espuma de aislamiento acústico que envolvía el escenario, según informa a 'Zero Hora' el delegado de la Policía civil, Sandro Meinerz.

Según el cartel que anunciaba la fiesta actuaban Clube do Samba y Live Pop Trio.

La evacuación inmediata del lugar fue dificultada por la existencia de una única salida de emergencia. Los bomberos se vieron obligados a abrir un agujero en una de las paredes para sacar a los asistentes con mayor rapidez.

Visita de Rousseff

La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, ha llegado la tarde del domingo a Santa María, e inmediatamente se ha dirigido a un hospital para visitar a algunos lesionados, según fuentes oficiales. Rousseff ha declarado tres días de luto oficial en Brasil en memoria de las víctimas.

Decretan 30 días de luto

Por su parte, el alcalde de la ciudad brasileña de Santa María, Cezar Schirmer, ha decretado luto oficial de treinta días por la tragedia ocurrida con el incendio de la discoteca Kiss.

Schirmer, que llegó de madrugada al lugar de la tragedia para seguir de cerca las tareas de rescate, ha pedido que todos los médicos, enfermeros, sicólogos y demás profesionales del área de la salud de la ciudad se pongan a disposición de las víctimas y de sus familiares con carácter urgente, según informa la Alcaldía.

El alcalde ha recibido a la mañana al gobernador de Río Grande do Sul, Tarso Genro, y espera para esta tarde la llegada de la presidenta Dilma Rousseff.

Santa María es una ciudad de 261.000 habitantes con un alto porcentaje de población joven ya que alberga ocho universidades, la más importante de las cuales es la Universidad Federal de Santa María, a la que pertenecían centenares de estudiantes presentes en la discoteca escenario de la tragedia.

Trabajadores 'entrenados'

La administración de la discoteca brasileña Kiss lamentó el incidente e informó de que sus trabajadores están "debidamente entrenados y preparados para cualquier situación de contingencia".

En un comunicado publicado en su página de Facebook, Kiss asegura que la prioridad de la discoteca es prestar toda la asistencia posible a los supervivientes y a las familias de las víctimas y que por ello se está facilitando toda la información posible, así como un "equipo multidisciplinar" formado por psicólogos, médicos o asistentes sociales, entre otros.