La plantilla de BSH Ezquíroz vuelve al trabajo en plena incertidumbre tras el anuncio de cierre

La plantilla de la factoría que el fabricante de electrodomésticos BSH tiene en Esquíroz (Navarra) ha vuelto al trabajo este martes tras el parón navideño y en plena incertidumbre por el anuncio de cierre. La multinacional alemana comunicó el pasado 16 de diciembre, de forma sorpresiva, su intención de cesar la actividad en la planta y el consiguiente despido de sus 655 trabajadores. Desde entonces, está en vigor un expediente temporal de regulación de empleo.

A petición del comité de empresa, la dirección de la planta ha celebrado reuniones con la plantilla. Les han pedido que el arranque de la producción ha de realizarse "con normalidad", algo que desde la representación sindical, consideran "imposible" ante la situación de excepcionalidad.

El comité de empresa considera que la dirección de BSH Esquíroz está "en shock" y, por tanto, ha pedido tratar con la dirección alemana, algo por lo que también abogan tanto el gobierno foral como el español.

En un primer lugar, tratarán de que la compañía dé marcha atrás en su intención de cierre, algo casi imposible. De no ser así, demandarán un plan industrial que aclare el futuro de los 655 trabajadores y trabajadoras.

Organizada por el Ministerio de Trabajo del Gobierno español, este viernes hay prevista una reunión entre las partes en Madrid. La dirección de la multinacional ha confirmado su presencia en la reunión.  Está prevista, además, la presencia de representantes del Ministerio, así como del Gobierno de Navarra, en concreto su presidenta, María Chivite, y los consejeros de Industria, Mikel Irujo, y de Empleo, Carmen Maeztu.