Economía -
deustobarómetro
La preocupación por la vivienda se dispara en Euskadi hasta situarse a la par de sanidad
Un 41 % de las personas encuestadas en el Deustobarómetro de invierno de este año cita la vivienda entre los principales problemas del país. En la encuesta de hace un año, era apenas el 16 %. Además, la ciudadanía suspende las políticas públicas de vivienda (le da una nota de 3,8 sobre 10).
EITB Media
Euskaraz irakurri: Etxebizitzaren gaineko kezka ia hirukoiztu egin da azken urtean EAEn, osasungintzaren pare jartzeraino
La problemática de la vivienda y los desahucios ha emergido con fuerza como una de las primeras preocupaciones de la ciudadanía de la Comunidad Autónoma Vasca (CAV), según el Deustobarómetro de invierno.
La vivienda es citada por el 41 % de las personas encuestadas, un porcentaje que se ha disparado en el último año —ha subido 25 puntos, casi el triple—. En 2023, solo fue citada por el 16 % (ocupaba el quinto puesto en el ranking). Ahora, la preocupación inmobiliaria se sitúa casi a la par de sanidad, que sigue siendo el principal problema de Euskadi para el 42 %. El tercer lugar lo ocupa la carestía de la vida (lo cree así un 33 %).
Esta es una de las conclusiones recogidas en la última edición del estudio, que ha sido elaborado por 40dB en función de un millar de entrevistas realizadas entre los días 19 de noviembre y el 4 de diciembre, y cuyos principales datos han sido dados a conocer este jueves por los directores del proyecto, María Silvestre y Braulio Gómez, junto a la investigadora Iratxe Arístegi.
Además de ser una de las primeras preocupaciones actuales, la ciudadanía se muestra pesimista de cara al futuro: un 31 % de las personas encuestadas cree que nunca podrá comprarse una casa y un 28 % admite que tardará 10 años.
Así, la población vasca suspende las políticas públicas de vivienda, y ponen una nota de 3,8 sobre 10. Asimismo, la mayoría de la ciudadanía apoya la intervención del Estado en el mercado de vivienda. Una gran mayoría, 7 de cada 10, se muestra a favor de la declaración de zonas tensionadas para poner topes a los alquileres, la construcción de viviendas sociales de alquiler (86 %), que se aumenten las deducciones por alquiler (76 %) y que se permita a los Ayuntamientos liberar más suelo para ampliar la oferta de vivienda libre (75 %).
Un dato destacable: el 76 % de las personas encuestadas establecería un tope para que nadie pudiera tener más de dos viviendas en propiedad.
Una inmensa mayoría (91 %) confiesa que prefiere la propiedad al alquiler, y que la compra de inmuebles es la mejor forma de inversión (lo cree un 86 %). De la misma forma, 7 de cada 10 encuestados considera que alquilar es tirar el dinero.