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Visto para sentencia el juicio contra Glovo por el impago de cuotas de 168 repartidores en Gipuzkoa
La Seguridad Social reclama a Glovo un total de 410 587 euros de cotizaciones por las cuotas no pagadas en tres años de 168 repartidores, al entender que trabajaban como falsos autónomos. Sin embargo, la empresa ha negado esa cuestión, y ha insistido en que pueden rechazar pedidos de trabajo.
EITB Media
Euskaraz irakurri: Epai zain gelditu da Glovo enpresaren aurkako makroepaiketa Gipuzkoan
Este lunes ha quedado visto para sentencia el primer macrojuicio contra Glovo en Gipuzkoa, en el que la Seguridad Social le reclama un total de 410 587 euros de cotizaciones por las cuotas no pagadas de 168 repartidores o 'riders' durante tres años.
El importe exigido por la Seguridad Social hace referencia al periodo comprendido entre octubre de 2018 y diciembre de 2020, antes de la entrada en vigor de la ley rider.
Además de la empresa, estaban citados a la vista oral —celebrada en el Palacio de Justicia de San Sebastián— los 168 repartidores a los que se reclama el pago, que están representados por el sindicato LAB.
Glovo ha negado que los repartidores trabajaran como falsos autónomos, y ha insistido en que tienen total libertad para elegir días y horas de trabajo, incluso para rechazar pedidos. La Seguridad Social, por contra, cree que los repartidores eran penalizados por rechazar pedidos o por no trabajar, sin poder optar a los mejores horarios.
Se trata del primer juicio de este tipo en Gipuzkoa, pero ha habido otros en Bizkaia y Navarra. Unos 300 repartidores ganaron el juicio de Bilbao, en una sentencia que obligaba a la empresa su contratación como asalariados. Otra sentencia del Juzgado de lo Social nº 1 de Pamplona concluyó que existía una relación laboral entre los 206 repartidores de Navarra y la empresa, y exigía su contratación. Sin embargo, los trabajadores denuncian que sus condiciones laborales no han mejorado.
El juicio de Gipuzkoa llega una semana después de que la empresa anunciara que cambiará su modelo de falsos autónomos y contratará a los repartidores.
El fundador y consejero delegado de Glovo, Oscar Pierre, aseguró la semana pasada en otro juicio contra Glovo en Barcelona que la decisión de la empresa de hacer contratos laborales a sus repartidores tiene como objetivo "evitar discusiones en los tribunales y con la Inspección de Trabajo".