Economía -
Accidente laboral
Dos personas fallecidas y otra herida en un accidente laboral en una bodega de Lanciego
Uno de los afectados se ha caído al depósito abierto donde se elaboran los caldos. Sus compañeros han tratado de ayudarle, pero todos ellos han inhalado anhídrido carbónico y dos han fallecido. Los dos fallecidos eran cuñados.
agencias | eitb media
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Dos hombres, de 60 y 61 años, han fallecido y otro, de 31, ha resultado herido y evacuado a un hospital de Logroño en un accidente laboral ocurrido este domingo en una bodega de elaboración de vino de la localidad alavesa de Lanciego. Los dos fallecidos eran cuñados.
Fuentes del Departamento vasco de Seguridad y del Departamento de Agricultura de la Diputación de Álava han informado de que pasadas las 13.30 horas alguien ha llamado a los servicios de emergencias porque había tres personas en mal estado.
Cuando han llegado al lugar las ambulancias, el médico ha confirmado el fallecimiento de dos de los afectados. El tercero, un peón, ha sido evacuado en un helicóptero a un hospital de Logroño.
Se ha abierto una investigación para aclarar las circunstancias del suceso. Los hechos han ocurrido en una bodega que elabora vino pero no lo embotella y, al parecer, uno de los afectados se ha caído al depósito abierto donde se elaboran los caldos.
Sus compañeros han tratado de ayudarle, pero todos ellos han inhalado anhídrido carbónico, lo que ha acabado con la vida de estas dos personas.
Se ha celebrado un pleno extraordinario a las 19:00 horas y el Ayuntamiento ha convocado tres días de luto.
¿Qué es el "tufo del vino"?
Al anhidrido carbónico o dióxido de carbono que desprende el vino o la sidra, entre otros, durante su fermentación se le llama coloquialmente "el tufo del vino", tal y como ha explicado el enólogo Mikel Garaizabal, en declaraciones para EITB Media. "Es un gas tóxico que se produce durante ese proceso de fermentación alcohólica", ha indicado.
Al caer en un depósito de vino, los trabajadores de la bodega fallecidos "habrían perdido primero el conocimiento, por la falta de oxígeno como consecuencia del anhidrido carbónico, y finalmente, desgraciadamente, habrían muerto". "Es un gas muy peligroso, tenemos que tener mucho cuidado, y tener la bodega bien aireada para que el anhidrido carbónico se volatice", ha apuntado.