Economía -
Pobreza energética
El Gobierno Vasco adapta las ayudas sociales a las subidas de los precios del gas y la electricidad
Duplica, además, la asignación a Cruz Roja para paliar la pobreza energética de las familias vulnerables que quedan fuera del sistema.
I. G. | EITB MEDIA
Euskaraz irakurri: Eusko Jaurlaritzak gizarte-laguntzak egokitu ditu gasaren eta elektrizitatearen prezioen igoerara
El Gobierno Vasco reforzará en 2022 las herramientas para hacer frente a la denominada pobreza energética. Lo hará a través de las Ayudas de Emergencia Social (AES), gracias a una adaptación de las cuantías a los nuevos precios, y también a través de Cruz Roja. Precisamente, el Gobierno Vasco firmó con esta entidad un convenio en 2015 para facilitar el pago de las facturas de luz, agua y gas a familias que atraviesan graves dificultades económicas y que no son beneficiarias de las Ayudas de Emergencia Social o de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI).
En 2022, el Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales destinará 41,5 millones de euros a las AES y 800 000 euros más a financiar el convenio con Cruz Roja. Ante el incremento de precios de la electricidad, el gas y otros combustibles de uso doméstico, la asignación a Cruz Roja se ha duplicado este año y en las Ayudas de Emergencia Social se han modificado las cuantías anuales máximas a percibir por cada familia, pasando de 900 a 1500 euros anuales.
"El incremento de precios puede provocar que haya más familias que no puedan hacer frente a las facturas, especialmente estos meses de frío y menos horas de luz natural", ha declarado Lide Amilibia, viceconsejera de Políticas Sociales. "Con estas medidas pretendemos apoyar a las familias y personas más vulnerables, evitando que sufran cortes de suministro", prosigue.
En 2020 fueron 63 176 las personas beneficiarias de AES y se recibieron y atendieron 16 180 solicitudes para afrontar gastos energéticos: 10 821 en Bizkaia; 3815 en Gipuzkoa y 1544 en Álava.