Economía -
CONFLICTO LABORAL
Tres detenidos en una protesta en Tubacex de Llodio
Además, 13 ertzainas han resultado contusionados en los incidentes. Los tres detenidos han quedado en libertad.
EITB MEDIA | AGENCIAS
Euskaraz irakurri: Hiru pertsona atxilotu dituzte Laudion Tubacexen egindako protesta batean
Tres personas han sido detenidas y seis identificadas en calidad de investigadas por su presunta participación en un enfrentamiento contra la Ertzaintza durante una concentración de empleados de la empresa Tubacex de Llodio, inmersa en un proceso de despidos que puede afectar a 150 trabajadores. Además, 13 agentes han resultado contusionados.
Los hechos han ocurrido hacia las 07:30 horas, en el momento en que llegaban a la planta los autobuses con los trabajadores que no se encuentran en huelga, la Ertzaintza ha indicado a los manifestantes que se apartaran para dejar entrar a los vehículos en las instalaciones.
En ese momento se encontraban en la concentración alrededor de 200 personas en protesta contra los despidos anunciados por al dirección de la empresa y en defensa del empleo. La movilización había dado comienzo hacia las 05:00 horas, según las informaciones facilitadas por el Departamento vasco de Seguridad.
Tras las indicaciones de los agentes, según ha precisado el Departamento, algunas personas han procedido a lanzar petardos y la Ertzaintza ha tenido que hacer uso de material antidisturbios para franquear el paso a los autobuses.
Según la Policía Autónoma, ante el caso "omiso" de varios de los concentrados a las advertencias de los agentes y en el marco de los incidentes, la Ertzaintza ha procedido a detener a dos personas por atentado contra la autoridad y otras seis han quedado en calidad de investigados. Una tercera persona ha sido detenida horas después.
Este tercer arresto ha tenido lugar a las 16:00 horas, cuando la salida de la fábrica de un autobús que llevaba a trabajadores de Tubacex ha reproducido los incidentes que se habían dado a la mañana, a la entrada de los autocares con operarios que iban a trabajar. En estos disturbios ha habido dos ertzainas contusionados.
Los tres detenidos han quedado en libertad a lo largo de la tarde.
Como consecuencia de los incidentes, 13 ertzainas han resultado contusionados y han tenido que ser atendidos en centros sanitarios sin que hayan requerido evacuación a ningún centro hospitalario.
Dirección y comité mantienen este martes una reunión, después de que el pasado 8 de febrero la empresa anunciara que el ERE que pretende aplicar en las plantas alavesas puede afectar a 150 trabajadores y el ERTE a la totalidad de la plantilla, algo más de 800 empleados.
CCOO Euskadi ha calificado de "desmedida" la carga de la Ertzaintza contra lo que el sindicato considera que se trataba de una movilización "pacífica" de la plantilla de Tubacex, a primera hora de esta mañana, a la entrada de la planta del fabricante de tubos en Llodio (Álava).
En un comunicado, el sindicato ha remarcado que "en el día de hoy, y una vez más, la Ertzaintza ha vuelto a actuar con una represión desmedida ante una concentración pacífica, en forma de sentada protagonizada por la plantilla de Tubacex en Laudio", y dentro de "unas protestas laborales que no buscan otra cosa que la defensa del empleo".
Ante esta situación, CCOO hace un llamamiento al Gobierno Vasco a "actuar con altura de miras y abandonar la senda de tratar de convertir las movilizaciones de trabajadores en una cuestión de orden público".
Por su parte, el sindicato policial ErNE ha solicitado al Departamento de Seguridad "más medios materiales y humanos para garantizar la seguridad de los ertzainas" y evitar "desgracias".
El sindicato ha afirmado que son "lamentables" las condiciones en las que hacen frente a estas actuaciones y ha criticado que el Departamento que les debe proteger, les mande "a la guerra para perder".
El sindicato de la policía vasca Esan ha mostrado su "apoyo y ánimo" a los ertzainas heridos, al tiempo que ha advertido de que "no se puede mandar a 24 agentes a controlar a 300 personas armadas con palos, piedras y botellas, pretendiendo que su labor de contención pase por ser golpeados y pateados en el suelo, con la única esperanza de que aguanten sus defensas y no resulten heridos".