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Conflicto laboral

La plantilla de Siemens Gamesa acepta el preacuerdo y el cierre de la planta de Aoiz

La reunión ha sido muy tensa. El resultado de la votación de la plantilla ha sido de 148 votos a favor, 37 en contra y 2 votos en blanco. Finalmente, la empresa recolocará a 88 de los 238 operarios.

Trabajadores de Siemens Gamesa entran a la reunión esta mañana. Imagen obtenida de un vídeo de EiTB.
Trabajadores de Siemens Gamesa entran a la reunión esta mañana. Imagen obtenida de un vídeo de EiTB.
Tensa reunión de los trabajadores de la planta de Siemens Gamesa en Aoiz

1:30

eitb.eus

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Euskaraz irakurri: Siemens Gamesaren Agoitzeko lantegia ixteko aurreakordioa onartu dute beharginek

La plantilla de la planta de Siemens Gamesa en Aoiz (Navarra) se ha reunido esta mañana, sobre las 11:30 horas, para votar el preacuerdo cerrado in extremis por los representantes de los trabajadores y la patronal en la última reunión. Finalmente, los trabajadores (148 votos a favor, 37 en contra y 2 votos en blanco) han apoyado el documento, según ha adelantado ETB. La reunión ha sido muy tensa.

La reunión del viernes era la última oportunidad para el acuerdo entre el comité de empresa y la compañía, ya que Siemens Gamesa se negó a pactar una prórroga de las negociaciones. Los trabajadores rechazaron la última propuesta de la compañía el jueves, y finalmente, han logrado mejorar las condiciones del plan que cerrará una fábrica donde trabajan 239 personas.

El documento firmado en el último momento conlleva que los despidos se ejecutarán entre el 25 de agosto y el 30 de septiembre, mejora las indemnizaciones e incluye un plan de recolocación de al menos un año para toda la plantilla, así como la posibilidad de recalar en otra fábrica de la multinaiconal.

Así, los 239 trabajadores de la planta de Aoiz estaban hoy llamados a tomar una decisión que condicionara sus vidas tras el preacuerdo firmado anoche entre la empresa y el comité de trabajadores.

Decir que sí a un acuerdo que supone el cierre de la empresa mejorando las condiciones con las que serán despedidos ha sido una decisión “muy difícil” para ellos.

Según ha informado la dirección, el acuerdo incluye un plan de prejubilaciones para los empleados que tienen 55 años o más, y también se ha acordado una indemnización por despido de 45 días por año trabajado (superior a los 20 días que establece la ley) con un mínimo de indemnización de 30.000 euros.

Además, la empresa ha presentado un plan de recolocaciones en la compañía con 88 puestos de trabajo, por lo que si se cubren todas las vacantes, el número total de empleados afectados por el procedimiento de despido se reducirá a 150, desde los 238 iniciales.

Asimismo, Siemens Gamesa ha contratado a una empresa de recolocaciones externas que ya ha identificado vacantes en otras empresas a las que podrán optar los empleados de Aoiz.

En una nota, la compañía se muestra "satisfecha" de haber llegado a un acuerdo que limita el impacto del ERE presentado hace un mes, si bien es "consciente del impacto negativo que el cierre de la planta tiene para los empleados finalmente afectados".

La empresa dice haber "examinado cuidadosamente todas las opciones disponibles antes de tomar esta decisión, pero ha llegado a la conclusión de que no hay alternativa. La decisión de cerrar la planta de Aoiz se debe a sus mayores costes y su posición geográfica, que la hacen poco competitiva para los mercados mundiales", incide.

ELA denuncia la "actitud cruel e inhumana" de la dirección

Por su parte, el sindicato ELA, con mayoría en el comité de empresa, ha denunciado la "actitud cruel e inhumana" de la dirección, "una multinacional con millones de beneficios que ha actuado sin importarle el futuro de 239 familias".

En una nota ELA asegura que Siemens Gamesa ha sometido a "un auténtico chantaje a la plantilla condicionando las mejoras indemnizatorias a la firma del comité cuando la empresa tenía la posibilidad de hacerlo unilateralmente".

Por ello, en la asamblea de este sábado este sindicato ha defendido no firmar el expediente y judicializarlo porque cree que las causas no estaban justificadas "al tratarse de un claro caso de deslocalización", dicen tras recordar que Siemens ha obtenido en los últimos nueve meses del año fiscal un beneficio neto de 2.272 millones de euros.

Además, ELA lamenta la "incapacidad" del Gobierno de Navarra a la hora de buscar una alternativa al cierre, "y más tratándose de una empresa que ha recibido millones de euros de dinero público", dice para añadir que el cierre de esta empresa va a castigar a "una zona de Navarra con alto nivel de paro y un problema evidente de despoblación".

LAB: "El final es el peor de todos"

El sindicato LAB ha lamentado que "el final es el peor de todos", el cierre de la planta cuya dirección ha tenido como "única acción poner precio al despido" con un "claro y permanente chantaje".

Así lo señala en una nota LAB, muy crítico con el "objetivo claro" de la multinacional de "deslocalización y destrucción de cientos de empleos, sin disposición ni voluntad negociadora".

El sindicato denuncia que plantear el cierre de una empresa como esta "en pleno periodo vacacional y con pocas semanas de negociación, no hace más que manifestar la mala fe de la compañía, que no ha mostrado ni la más mínima voluntad de crear opciones de reindustrializar, ni por ellos ni por unos terceros".

Además, a su juicio la dirección ha centrado las negociaciones en un "claro chantaje permanente para, ademas, hacerlo con la firma del comité (o firmáis o no os damos más dinero y os vais con el mínimo legal...)", explican.

El Gobierno navarro pedirá la devolución de dos millones en ayudas

Por otro lado, el Gobierno de Navarra va a solicitar la devolución de en torno a dos millones de euros de las ayudas públicas recibidas por Siemens Gamesa "por no cumplir los requisitos para esas ayudas" tras anunciar el cierre de su planta en Aoiz.

Así lo anunció el viernes la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, que afirmó que el Ejecutivo foral "ha trabajado de la mano del comité de empresa" y "ha puesto encima de la mesa todos los mecanismos y herramientas" para evitar este cierre, que ha definido como "un caso clarísimo de deslocalización".

Chivite reconoció que la plantilla "está viviendo una situación muy complicada porque hace apenas tres meses tenían compromiso de trabajo y todo iba bien". "La empresa no ha sido honesta y transparente con sus trabajadores diciéndoles cuál era la situación", criticó.

"Hemos procurado hacer todo lo que ha estado en nuestra mano para garantizar el trabajo de estas personas" y por "el impacto que tiene en la zona de Aoiz", subrayó Chivite. En esta sentido, trasladó al alcalde de la localidad que hay otras "cuestiones encima de la mesa en el medio plazo para garantizar el desarrollo y el equilibrio territorial" de la zona.

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