Fuertes disturbios y protestas de los 'chalecos amarillos'

Este sábado, 18º consecutivo de movilizaciones de los "chalecos amarillos", se ha saldado con numerosos disturbios en el Estado francés. Las autoridades han reconocido 14.500 manifestantes en todo el Estado, 10.000 de ellos en la capital, París.

La Prefectura de la Policía de París ha anunciado 121 detenciones. Además, se ha informado de al menos 11 heridos leves.

Los agentes han empleado cañones de agua y gases lacrimógenos contra los manifestantes en los emblemáticos Campos Elíseos. En respuesta, se han levantado barricadas en las calles y se han incendiado contenedores y vehículos.

"¡Emmanuel Macron, jefe de la estafa!" o "¡Vamos a registrar tu casa!" han sido algunas de las consignas coreadas.

Entre los incidentes más importantes registrados cabe destacar el incendio en una sucursal bancaria de la avenida Franklin D. Roosvelt donde "una madre y su bebé han tenido que ser rescatados por los bomberos tras quedar atrapadas en el segundo piso" según han explicado los bomberos y el saqueo a manos de individuos vestidos de negro y encapuchados del histórico restaurante de lujo Le Fouquet y de las tiendas de Hugo Boss y Nespresso en la zona de los Campos Elíseos.

El ministro del Interior, Christophe Castaner , ha denunciado el incendio y si antes había denunciado la presencia de "matones profesionales" entre los manifestantes, ahora ha dicho que "no son matones, son asesinos".

También la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, ha condenado "los abusos insoportables cometidos".

Las movilizaciones de los "chalecos amarillos" comenzaron en noviembre para protestar contra la subida de los impuestos al diésel y en diciembre alcanzaron su punto álgido con las protestas contra la represión de las manifestaciones hasta el punto que Macron anunció un paquete de medidas económicas para mejorar las condiciones de vida de la clase media y trabajadora.