La segunda fase de la Supersur podría adjudicarse a finales de octubre

La Diputación Foral de Bizkaia se ha fijado en Holanda para seguir avanzando en el proyecto de construir un túnel bajo la ría que sirva de conexión entre las dos márgenes del Ibaizabal. Responsables del área de desarrollo territorial han visitado la región de Zeeland, donde se encuentra el Westerschelde Tunnel. Se trata de un túnel submarino de 6,6 kilómetros de longitud en la autopista holandesa N62 y es, además, el túnel de carretera más largo de los Países Bajos.

El diputado de Desarrollo Económico y Territorial, Imanol Pradales, ha recordado que el trazado exacto del túnel bajo la ría deberá determinarse en un estudio informativo que se ha adjudicado este pasado mes de julio.

Pradales ha explicado que Westerschelde Tunnel guarda alguna similitudes con el proyecto de túnel bajo la ría por el que ha apostado la Diputación Foral de Bizkaia para poner fin a la vulnerabilidad de la red de alta capacidad del territorio ante la falta de alternativa a Rontegi.

El diputado ha subrayado que la construcción de un túnel bajo la ría y la segunda fase que completará la Supersur son las dos grandes actuaciones del plan integral proyectado por la Diputación Foral de Bizkaia para atajar el problema de densidad de tráfico que sufre la red metropolitana. Así, Pradales ha anunciado que la segunda fase de la Supersur podrá adjudicarse entre finales de octubre y principios de noviembre para hacer posible el inicio de las obras en 2019.

Ambas actuaciones suponen una inversión global de 580 millones de euros. Y su puesta en marcha será escalonada: así, la segunda fase de la Supersur podría estar operativa en torno a 2023, mientras que el túnel no lo estaría antes de 2027.