Felipe Etxebarria
Análisis
Alerta en Bruselas por la dimisión del ministro del 'brexit'
Felipe Etxebarria
Desde Bruselas se teme que la actual posición, más conciliadora del primer ministro Boris Johnson, pueda ponerse en cuestión por presión de los partidarios mas duros del 'brexit' y el nuevo sustituido del ministro dimitido.
En las últimas semanas el gobierno de Londres había flexibilizado su postura respecto a la exigencia de renegociar el protocolo sobre Irlanda del Norte en el post- 'brexit', una especie tregua en vísperas navideñas.
Londres plantea dos exigencias: Por un lado, levantar los controles aduaneros a las mercancías británicas en los puertos Irlanda del Norte, incluida en el mercado único europeo. Los unionistas norirlandeses protestan porque se ven excluidos del mercado británico. La UE no quiere prescindir de estos controles, previstos en el protocolo, para cumplir con los Acuerdos de Paz del Viernes Santo, evitando que esos controles se establezcan en la frontera de las dos Irlandas.
En segundo lugar, Londres exige prescindir del Tribunal Europeo a la hora de dirimir conflictos en el cumplimiento de los acuerdos del 'brexit', y apuesta por recurrir a una instancia exterior de la UE para el arbitraje en las desavenencias bilaterales.
Desde Bruselas se teme que la actual posición, más conciliadora del primer ministro Boris Johnson, pueda ponerse en cuestión por presión de los partidarios mas duros del 'brexit' y el nuevo sustituido del ministro dimitido. Algunos diplomáticos de la UE esperan que Londres adopte una actitud más pragmática y anteponga un clima positivo de colaboración por el bien general de las relaciones con la UE.
Otra cuestión en disputa es la de los pescadores franceses que faenan en aguas británicas del Canal de la Mancha sobre lo que también negociaba el ministro Frost.
Además, en Londres había provocado frustración la exclusión del Reino Unido del programa de investigación e innovación de la UE, Horizonte Europa. Este es el programa más ambicioso de investigación y que cuenta con un presupuesto de 95 000 millones de euros. Un veterano diputado británico aseguró recientemente que los científicos del Reino Unido habían sido excluidos de ese programa por la disputa sobre Irlanda del Norte.
Francia ya ha pedido a Boris Johnson que utilice la sustitución de Frost para crear un clima de confianza con la UE.
