Jesús Torquemada
Análisis
El suicidio de Europa
Jesús Torquemada
El presidente de Hungría anuncia un referéndum para decidir si aceptan refugiados. El Espacio Schengen se va desmoronando y Europa, la Unión Europea, camina hacia su suicidio.
Austria y los países de los Balcanes decidieron ayer en una reunión coordinarse para impedir el paso de los refugiados. Es decir, no les dejarán que salgan de Grecia hacia el centro de Europa. Grecia se indigna y su primer ministro, Alexis Tsipras, dice que vetará cualquier resolución europea mientras no se ayude a Grecia en el asunto de los refugiados.
El acuerdo de reparto de 160.000 refugiados entre los 28 países de la Unión Europea, aprobado el pasado verano, es como si no existiera, no se está aplicando. El último en añadir controles en sus fronteras ha sido Bélgica, para impedir que entren en su territorio desde Francia los inmigrantes que están en el campamento de Calais. Y el presidente de Hungría, Viktor Orban, y dice que va a convocar un referéndum para que los húngaros decidan si quieren aceptar refugiados. El Gobierno húngaro votó en contra del acuerdo de reparto, levantó una valla en la frontera y no ha aceptado ni un solo refugiado. Y en ese referéndum va a hacer campaña por el "no". La verdad es que ni hace falta el referéndum, los húngaros ya han demostrado sobradamente que no quieren extranjeros allí. El Espacio Schengen se va desmoronando y Europa, la Unión Europea, camina hacia su suicidio.