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Internacional

Comisión de Investigación

Tony Blair no se arrepiente de haber invadido Irak

Redacción

El ex primer ministro británico ha dicho que, tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, él estimó que no podía asumir el riesgo de que Sadam Husein pudiera reconstruir su programa de armas.

El ex primer ministro británico Tony Blair ha insistido hoy en que tomó la decisión correcta al autorizar la guerra de Irak para derrocar al presidente Sadam Husein, si bien las supuestas armas de destrucción masiva nunca fueron halladas.

Al prestar declaración en Londres ante la investigación sobre la guerra de Irak (2003), Blair ha dicho que, tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 (11-S) contra EE. UU., él estimó que no podía asumir el riesgo de que Sadam pudiera reconstruir su programa de armas.

En última instancia, ha agregado el antiguo jefe del Gobierno británico, se trataba de hacer un juicio de valor y de tomar una decisión.

"La decisión que yo tomé, y francamente tomaría otra vez, fue que si había alguna posibilidad de que él pudiera desarrollar armas de destrucción masiva, debíamos detenerle. Ese fue mi punto de vista entonces y es mi punto de vista ahora", ha insistido Blair.

Al presentar sus argumentos sobre las razones que le llevaron a apoyar la invasión iraquí, Blair ha afirmado que la mayor parte de la actual desestabilización en Oriente Medio procede de Irán.

Así, Blair ha justificado la intervención militar del 2003 diciendo que el "cálculo del riesgo" que suponía Hussein cambió a raíz de los ataques terroristas contra Estados Unidos de América del 11 de septiembre de 2001.

11-S

El ex líder laborista ha explicado que antes del 11-S creía que Hussein podía ser controlado con una "política de contención", a través de sanciones pero "si esa gente, inspirada por fanatismos religiosos, hubiese podido matar a 30.000 lo habrían hecho, entonces llegué a la conclusión de que no se podían asumir riesgos en este asunto", ha afirmado.

Además, ha exculpado al ex presidente de Estados Unidos de América, George W. Bush cuando ha subrayado que esa posición fue "mía" y "británica" y no de EE. UU.