Los 'aires' mañaneros de Ibon, el despertador del equipo rojo
En el campamento muy pobre, Ibon saliva pensando en qué premio gastronómico le gustaría que les toque cuando ganen cuando, de repente, se ha echado un pedo. ¡Egun on, Ibon!
Si te interesó esto, quizá te interesen estos otros temas