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Jordi Sànchez, ANC
'Confío en que cuando se constituya un gobierno estable todo sea más fácil'
Radio Euskadi
Entrevista íntegra al expresidente de la ANC encarcelado desde hace más de dos años, y condenado por sedición. Ha respondido desde la cárcel de Lledoners el cuestionario de Radio Euskadi.
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Jordi Sànchez. Imagen: EFE
Euskaraz irakurri: Jordi Sanchez: 'Gobernu egonkor bat eratzen denean dena errazagoa izatea espero dut'
Entrevista íntegra al expresidente de la ANC, Jordi Sànchez, encarcelado desde hace más de dos años, y condenado por sedición en la sentencia del 'procés'. Ha respondido desde la cárcel de Lledoners el cuestionario de Radio Euskadi. Rechaza un adelanto electoral en Cataluña si su única función es el “apártate que me pongo yo”.
1- ¿Hace mella la cárcel en su ánimo? ¿Y en sus convicciones políticas?
Hasta ahora la dureza de la prisión no ha podido desanimarme ni condicionar mis convicciones políticas ni éticas. Sigo firme en la defensa del derecho a la autodeterminación y en la acción política de la no violencia y la desobediencia civil ante actuaciones y leyes injustas del estado. Y estoy convencido de que la política regresará para sustituir las togas en la gestión del conflicto político que viven España y Catalunya.
2- Tras haber leído y estudiado la sentencia, ¿entiende la condena?
La entiendo sólo desde la lógica política, no del derecho. La sentencia es la culminación de un castigo político impuesto por el poder judicial que atenta contra derechos fundamentales. El reciente informe de Amnistía Internacional es inequívoco al respecto.
3- La sentencia viene a decir que todo el movimiento independentista estaba desarrollando una especie de mascarada, en la que todo era de cartón piedra. ¿Fue así? ¿Todo era improvisación y presión en la calle y en las instituciones para buscar una negociación?
2,3 millones de ciudadanos depositando su voto en una urna no son cartón piedra. La movilización constante que se vive en Catalunya desde que el TC recortó el Estatuto en 2010 es la mayor que se ha vivido en Europa jamás. Y la exigencia de un referéndum para decidir el futuro tampoco es ningún postureo.
Dicho esto, es indiscutible la voluntad de diálogo del independentismo. Y el 1 de octubre era y sigue siendo un activo para negociar. Más de 6000 urnas y millones de papeletas repartidas en casi 2000 colegios electorales, con un censo y unas mesas constituidas en todos los centros de votación sin que la fuerte presencia policial lo pudiera impedir no se improvisa.
4- La situación política catalana se ha convertido en una trituradora que ha desestabilizado primero a Catalunya, y luego a España, haciendo que su sistema haya crujido, llevando incluso a condenas durísimas. ¿Cómo se puede reconducir la situación?
Diálogo y negociación en un marco de respeto democrático. No hay más secreto. Todo el mundo sabe que la solución pasa por aquí. ¿A qué esperamos para asumir el reto del diálogo y salir de la comodidad de la negación de las razones del adversario?
5- Sin Catalunya estable, no hay España estable. Es algo que parece no entenderse aún en Madrid. Además, ahora hay una fuerza de extrema derecha en auge, y otra (Ciudadanos) de origen catalán, que no se sienten parte de los pactos de 1978. ¿Puede implosionar todo?
El sistema del 78 ya ha implosionado. Ahora hay que ver cómo y cuándo se recompone esa España después de incorporar el derecho a decidir. Cuanto más tarde se asuma esa salida, mayores serán los costes políticos, económicos y sociales para toda España.
6- El presidente del gobierno pide autocrítica y rectificación al independentismo catalán, pero en Madrid no hay rectificación. ¿Así hasta el infinito?
Para dialogar todos los actores tendremos que hacer autocrítica. Pero vivir en permanente campaña electoral y pendiente de las elecciones impide esa autocrítica. Confío en que cuando se constituya un gobierno estable todo sea más fácil.
7- ¿Podría resistir Catalunya otro 155? Hay quien interpreta de las actuaciones del president Torra que las instituciones son para él secundarias. ¿Hay que preservarlas ante todo?
Sin lugar a dudas hay que preservar las instituciones de autogobierno pero no a cualquier precio. No se puede imponer, como ahora el TC pretende, una censura permanente al debate parlamentario. Si un parlamento no puede hablar y posicionarse ante cualquier tema, lo que se está haciendo es matar el parlamentarismo, la esencia de la democracia.
8- Hemos visto episodios de violencia e intolerancia en los últimos meses. A veces, desde fuera, se tiene la impresión de que la gente está a un paso de partirse la cara en la calle. ¿Puede haber una chispa que deteriore más la situación con una desgracia personal?
Reconozco que no tengo el pulso exacto de la calle, llevo 25 meses en prisión. Pero, sinceramente, no creo en el relato que afirma la existencia de esa fractura. Confundir polarización con fractura es grave. Además, los episodios de los altercados, pese a ser preocupantes, no hay que sobredimensionarlos, y añado que con la violencia y los altercados el Estado juega en casa, tiene todas las de ganar.
9- ¿Qué es más viable, la independencia o un arreglo que permita el reencaje de Catalunya en España?
Una salida u otra la deberá tomar la ciudadanía votando en un referéndum. No hay solución sin referéndum. Si hacemos caso de las encuestas no es evidente cuál es la preferencia mayoritaria de la ciudadanía. La mía es la independencia.
10- ¿Sería conveniente una convocatoria electoral en Catalunya para aclarar el panorama?
Faltan dos años para finalizar la legislatura. El anticipo solo está justificado si quien lo pide explica qué haría distinto de lo que ahora no se puede hacer. Creo que nadie está en esa tesitura. Otra cosa es aquellos que piden elecciones para practicar la máxima de “apártate, que me pongo yo”. Esa actitud es legítima, pero no para justificar un avance electoral.
11- ¿Para cuándo espera el primer permiso para salir de la cárcel?
A partir de febrero, cuando haya cumplido una cuarta parte de la condena. Por entonces llevaré preso 28 meses. Serán permisos de 48 horas, con un máximo de 36 días al año. No es ninguna concesión, es el derecho de todo preso. La derecha española también miente en esta cuestión. ¡Algunos nos querrían ver cumpliendo prisión permanente!
12- ¿Solicitaría un indulto?
No. El indulto es una medida personal y yo no estoy en prisión por una cuestión personal. La solución justa a una condena política requiere una amnistía.
13- En lo personal, ¿esto le ha merecido la pena? ¿Lo volvería a hacer?
La prisión es muy dura, especialmente para los familiares. Nadie nos devolverá los años robados. Pero no me arrepiento de mi actividad social y política. Para hacer un balance hay que dejar pasar más tiempo. Las conquistas democráticas de derechos se consiguen a medio y largo plazo. Lo importante es tener conciencia de ello y seguir en la lucha democrática y no violenta. Y viendo la respuesta de la sociedad catalana no tengo dudas de que ha valido la pena. Cuando salga de prisión seré uno más, comprometido como lo estaba antes de entrar.